Hoy os traigo el análisis de Dragon Quest III HD 2D Remake para PC. Conocido por aquel entonces como Dragon War III esta polémica entrega de la saga Dragon Quest. La controversia del título se dio tanto en Japón como en Occidente, aunque por distintos motivos, pero a día de hoy se le conoce como una de las entregas más importantes de la franquicia, además de como un juego de culto.
Este análisis ha sido posible gracias a una clave facilitada por Plaion para la publicación de contenido.
La historia de un héroe
En el pasado, un valeroso héroe llamado Ortega dejó atrás a su familia para luchar contra el villano principal, el archidemonio Baramos. Sin embargo, sus esfuerzos fueron en vano, dejando el mundo a merced de su enemigo; o eso pensábamos, ya que su sucesor sería el encargado de continuar con su legado y su tarea en salvar al mundo.
Ante todo hay que tener en cuenta que estamos ante un juego bastante antiguo, uno que fue lanzado a finales de vida de la Famicom o NES, por lo que, diciendo esto podéis imaginar que su historia es bastante simple. Una clásica epopeya en la que el héroe debe vencer al malvado de turno, no sin antes ayudar a todas y cada una de las personas que se encuentra de camino.
Es una historia simple, que no se asemeja a las que hay actualmente, pero que hay que tener en cuenta que, aunque sea un remake, tiene que mantener lo que en antaño fue. Aún así, no resulta aburrida, sino que nos permite jugar más relajadamente, disfrutando de otros aspectos, además de un ameno y relajado viaje.
La historia se dividirá en pequeños arcos en los que se nos presentará un problema, tendremos que ir a la mazmorra relacionada con la situación y salvar el día, todo ello mientras recopilamos información para derrotar en un futuro a Baramos.
Por otro lado, el mayor problema que le encuentro en cuanto a historia, es que nuestros compañeros son, al igual que otros de la saga, mercenarios sin personalidad que customizamos a nuestro antojo y que no nos dan una sola línea de diálogo. Es bueno a nivel de jugabilidad, pero en cuanto a historia, y viendo otros como el famoso Periplo del Rey Maldito, se queda bastante corto.
Un RPG de toda la vida
Dragon Quest III es un RPG por turnos, que consta de mucha exploración, la cual es llevada a cabo en un mapa de mundo abierto o por lo menos como quiere mostrar, ya que, en realidad, son amplias zonas interconectadas, sólo accesibles después de hacer una serie de eventos en el área anterior, lo cual suele incurrir terminar la mazmorra principal de ésta.
El juego se nos presenta con nuestros personajes sobre un mundo similar a un minimapa, al igual que ocurría en cualquier rpg de entonces, como podían ser los primeros Final Fantasy o Chrono Trigger, pero que al entrar en una población o en una mazmorra (dungeon), el lugar se tornaba de un tamaño mucho más parejo con el de los personajes, sintiéndose más natural.
El sistema de encuentros es uno que mucha gente considera desfasado a día de hoy, pero que otros tantos disfrutan, ya que, al igual que cualquier rpg de entonces, entraremos en combate de forma aleatoria sin interactuar con ningún enemigo, salvo por aquellos enfrentamientos importantes, normalmente dados por historia o por contrincantes especialmente fuertes.
Dentro de éstos nos encontramos con distintas acciones entre las que podemos remarcar cuatro en específico. Tenemos los hechizos y las habilidades, los cuales, se aprenden subiendo de nivel y que se dividen en daño, curación, buffos y debuffos. Hasta ahí, bien. Sin embargo, veo un error importante en algunas de las descripciones, puesto que, es ligeramente complicado saber, qué hechizo hace más daño y aplica efectos de estado extra.
Entre los otros comandos, estaría el de equiparse y el de uso de objetos, ya que ambos comparten una cosa muy particular en la saga, que es la bolsa propia, es decir, si quieres que un personaje se equipe o use un objeto específico, tendrás que habérselo dado en su bolsa personal, antes del enfrentamiento o no podrás hacer nada con ello.
En cuanto al sistema de jobs o vocaciones, tenemos los 8 originales y uno más completamente nuevo, el domador de bestias; un trabajo que empieza bastante simple, pero que sin duda se vuelve realmente poderoso. El protagonista tendrá uno único, mientras que los compañeros podrán escoger entre 8 y luego cambiar, siendo el de sabio el único que solo se puede obtener en ese momento.
Por último, se han introducido unas cuantas mejoras para incrementar la calidad de vida durante el gameplay como son la posibilidad de acelerar los combates, dos dificultades extra, la opción de un marcador en el mapa y minimapa con el objetivo principal, y la posibilidad rememorar viejas conversaciones que hayamos olvidado.
Renovado, pero vintage
Manteniendo las memorias y la nostalgia, el remake que se nos ha entregado es un recuerdo claro y vívido de la experiencias pasadas, puesto que se ha mantenido un pixel art con un falso 3D, similar al apartado artístico de otros juegos de Square Enix como Octopath Traveler, lo cual ya apunta a un muy buen trabajo.
A pesar de ser un juego pixel art, el diseño de escenarios y personajes, los enfoques de la cámara y la apariencia de los cambios horarios, hacen que el juego se muestre realmente precioso. No se percibe un juego falto de detalles, sino como un trabajo cuidado, que pretende que el factor de estar pixelado, sea algo positivo y que mejore la experiencia a nivel gráfico.
Por otro lado, una de los aspectos que echaría de menos son los retratos. Al ser un remake 2D de un juego tan importante, se esperaría algo que distinguiría las cinemáticas del simple gameplay. Algo usual en muchos juegos, es el uso de retratos de los personajes para que se muestren cuando estén hablando o cualquier otro factor diferenciador.
Por último, el HUD es el clásico que se ha mantenido siempre en la franquicia, es decir, cuadrados y rectángulos de color azul que permiten diferenciar perfectamente los distintos textos. La única contra del mismo son los iconos de los ataques, que no denotan siquiera el tipo de elemento de los mismos.
El legado de Koichi Sugiyama
Hace ya tres años que Koichi Sugiyama murió, por lo que las composiciones actuales ya no están a su cargo. Sin embargo, la música de Dragon Quest es legado en la saga, lo que implica que una gran cantidad de ellas son y serán siempre las mismas, aunque se tenga que hacer un trabajo extra en cuanto a la limpieza o tratado de dichas composiciones para que luzcan mejor.
Por lo qué, con lo dicho y por supuesto gracias a un gran trabajo por parte de la sección encargada de las composiciones, el resultado de la música es totalmente maravilloso. Cada paso se siente como una gran aventura llena de momentos felices, relajados y épicos, que son principalmente marcados por cada una de las notas.
Por otro lado, en cuanto a los efectos de sonido, nos encontramos un trabajo simple, pero que funciona, ya que al ser un juego en 2D, no han abusado de ellos, sino que detalles y ornamentos que finiquitan todas y cada una de las opciones. Todos ellos con un pequeño toque cómico, ya que son muy similares a los de los juegos de 8 y 16 bits y ya sabemos cómo lucen esos sonidos.
En cuanto al doblaje y a la traducción, tenemos que el primero está en inglés y japonés, mientras que el segundo está en múltiples idiomas entre los que encontramos el español. Lo más notorio. aún así, para mi gusto, es que toda la historia principal y otros momentos importantes han sido doblados, lo cual le ha dado mucha más personalidad a pesar de la falta de retratos u otros que comenté anteriormente.
Conclusión
Dragon Quest III 2D-HD Remake es un RPG por turnos en el que nos enfrentaremos a un terrible destino. Como hijos de Ortega, nuestra misión será la de derrotar al archidemonio Baramos, mientras recorremos hermosas tierras y luchamos contra feroces enemigos, todo ello acompañado de una hermosa banda sonora, nuevo doblaje y un renovado estilo artístico que mantiene la melancólica apariencia 2D.
Dragon Quest III 2D-HD Remake ya está disponible para Nintendo Switch, PlayStation 5, Xbox Series X|S, Steam y Windows PC. Este juego ha sido analizado con un ordenador de las siguientes características:- Sistema operativo: Windows 11
- Procesador: 12th Gen Intel(R) Core(TM) i7-12650H 2.30 GHz
- Memoria RAM: 16GB
- Disco duro: 1TB
- Tarjeta gráfica: NVIDIA GeForce RTX 4060 Laptop GPU
Dragon Quest III HD 2D Remake
Dragon Quest III 2D-HD Remake es un RPG por turnos en el que nos enfrentaremos a un terrible destino. Todo ello acompañado de una buena banda sonora, nuevo doblaje y un renovado estilo artístico que mantiene la melancólica apariencia 2D.
Lo mejor
- Nuevo job: Domador de bestias
- Sistema de jobs diverso y dinámico
- Visualmente hermoso
- Banda sonora preciosa
- Historia principal doblada
Lo peor
- Compañeros sin historia, ni personalidad
- Problemas en las descripciones de algunos hechizos y habilidades
- Un tanto desfasado para los jugadores más nuevos
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Historia
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Jugabilidad
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Apartado artístico
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Apartado sonoro