¿Tenéis ganitas ya de una buena peli de acción de veranito? Pues hemos visto Bad Boys: Ride or Die y creednos si os decimos que es la película ideal para empezar la racha de cine veraniego de acción sin parar. Explosiones, disparos y persecuciones… ¿Os pensabais que Furiosa iba a ser la ganadora en pelis de acción? ¡Pues aquí vienen Mike y Marcus para demostraros lo contrario! ¿Tenéis curiosidad? Pues seguid leyendo más abajo.
Bad Boys whatcha gonna do when we come for you?
La premisa de la película es muy simple (como el guion). Han declarado al fallecido Capitán Howard como culpable de corrupción interna en colaboración con el narcotráfico. Mike Lowrey (Will Smith) y Marcus Burnett (Martin Lawrence) están completamente seguros de que su antiguo compañero y capitán es inocente y van a hacer todo lo posible para demostrarlo. Incluso si esto conlleva tener que huir de la ley.
Durante la película Mike tendrá que enfrentarse a los fantasmas de su pasado, a su miedo al fracaso y a perder a sus seres más queridos. Marcus, su compañero de siempre, sufrirá un evento que le cambiará la vida por completo, y aparte de ser el guiño cómico del film, hará de gurú guía para Mike y se encargará de librarle de su maldición.
En esta secuela directa de Bad Boys for Life (recomendamos que la veáis antes) volverá a aparecer Armando (Jacob Scipio) el hijo “bastardo” de Mike y que tendrá un papel muy importante en la resolución del caso. El enemigo directo, un capo del narcotráfico interpretado por Eric Dane, comandará un grupo de mercenarios extremadamente despiadados que harán lo posible para que Mike y Marcus no descubran el complot.
También vuelven antiguos personajes de la anterior película, como la inspectora Rita (Paola Nuñez), o los compañeros de comisaría Kelly (Vanessa Hudgens) y Dorn (Alexander Ludwig). Tendremos nueva gente como Lockwood (Ioan Gruffudd), marido y político en ciernes de Rita, Christine (Melanie Liburd), la mujer de Mike o Rhea Seehorn y Quinn Hemphill, hija y nieta respetivamente del capitán. Habrá dos cameos que no tendréis que buscar, uno seguramente ya lo imagináis si venís de Bad Boys for Life y el otro lo reconoceréis al instante.
Cuando Bad Boys se convierte en Call of Duty
Si habéis seguido canales cinéfilos, habréis visto una secuencia de acción donde Will Smith maneja una especie de rig de cámara que se gira sobre el eje dándonos dos planos, el del actor portando la pistola en plena acción seguido de un plano subjetivo donde veremos la acción al puro estilo Call of Duty. Todo sin cortes.
Aunque en particular esos planos son menos de diez en toda la cinta, y ya vimos algo parecido en la película de Doom de 2005, el efectismo que consigue hará que mucha audiencia joven se sienta identificada con el punto de vista de sus franquicias de videojuegos favoritas.
Y es que, en esta ocasión, los directores Adil El Arbi y Bilall Fallah se han querido salir completamente de los estándares narrativos estándar de la industria y han querido experimentar con planos más típicos del comic o animación. Así es que tendremos picados y contrapicados imposibles, rotura de la horizontalidad, diagonales extremas y muchos planos detalle, primeros y primerísimos primer planos.
Toda la película está repleta de una exageración de grandes angulares, secuencias a cámara lenta de lo más absurdas, planos solo vistos en películas de super héroes… Es un sinfín de experimentos para un genero como es el policiaco de acción que, a mí particularmente, me han parecido una autentica maravilla.
Las secuencias a lomos de dron o sin ellos, planos secuencia imposibles, planos detalle de armas que ya quisiera Guy Ritchie… No hay por donde coger la lógica al montaje y dirección y eso la hace completamente única y doblemente entretenida.
La acción es interminable, desde el minuto uno Mike y Marcus ya tienen motivos para sacar su arma y liarse a tiros, y es que la quietud y la calma en esta cinta es inexistente. Si no están conduciendo a toda velocidad porque si, están pegando tiros o liándose a mamporros. Aquí quien no saca el arma para enseñarla no es nadie.
Más de lo de siempre pero más bonito
Pero no nos engañemos Bad Boys: Ride or Die es lo que es, una peli de acción, con un guion sencillo, chistes de mal gusto de penes y culos e insultos cariñosos entre compañeros, vamos a saber quien es el topo desde el minuto uno (puedes hacer apuestas que seguro que ganas)… En definitiva, es totalmente predecible y clásica, llena de tropos y clichés del género. ¿Eso la hace mala película? Para nada. Es increíble como sabiendo perfectamente que van a salir vivos de cualquier reto en el que los pongas, el montaje consigue mantenerte con los puños y dientes apretados todo el rato.
Además, retará al género intentando justificar de manera realista sus clásicos momentos de tensión, como por ejemplo añadiendo una polea a algo que pesa para que digas “anda bueno, si hay una polea, a lo mejor si puede con esos 200kg más fuerzas de 4Gs. Ah, que ahora hace el chimpancé y se cuelga del techo. ¡Totalmente posible!”. Rápido lo entenderéis cuando sepáis que los guionistas son Chris Bremner y Will Beall, creadores de El hombre de Toronto o Aquaman.
Pump it! (Louder)
La música estará muy presente en la cinta y el español ha llegado para quedarse. Oiremos grandes temas de los 90-2000 mezclados con artistas más actuales donde destacan los artistas latinos y la lengua española. Y es que cada día estamos más de moda y en Miami no por nada el 70% de la población ya es de habla hispana. Como ejemplo el tema principal de la película, TONIGHT, interpretado por Black Eyed Peas, El Alfa y Becky G.
En cuanto a efectos sonoros, ambiente, etc. podemos esperar lo esperable. Explosiones, disparos, cargadores acabándose, lengüetazos… (¿Qué? Shhh, tu ve la peli) Me sorprende que lo único que no se represente bien sea el sonido de los drones que hacen un ruido de la muerte y parece que son más silenciosos que una mosca.
En resumen
Bad Boys: Ride or Die nos ha parecido la perfecta cinta de acción para empezar el verano peliculero. Will Smith y Martin Lawrence están magníficos en sus papeles más icónicos y la edad no pasa por ellos (la felicidad si se nota un poco más en Lawrence). Si lo que tenéis son ganas de volver a ver a la pareja por que sois fans de la franquicia, adelante, vais a disfrutar como auténticos niños.
Por el contrario, si jamás habéis visto a estos dos policías rebeldes en acción (o sois muy jóvenes o habéis estado en una cueva metidos) os va a encantar la relación de estos dos amigos y como hacen todo por salvar a sus amigos y familia entre colegueos. No vais a saber quien es quien ni donde han llegado ahí, pero qué más da, ¡mira como explotan esos coches!
Nuestro veredicto es que si tenéis una tarde libre vayáis a verla, dura menos de 2 horas y aunque los últimos 15 minutos quizás ya tengas ganas de ir al baño, se pasa increíblemente rápido. Estará disponible en los cines españoles a partir del 7 de junio.
Damos las gracias a Sony Pictures por su invitación para ver este filme antes de su estreno y así poderos traer esta crítica. ¡Gracias por leernos!