Si sois amantes de los indies desconocidos estáis de enhorabuena, ya que hoy os traemos el análisis de Goliath Depot para Nintendo Switch, un arcade al más puro estilo old school que pondrá a prueba todos vuestro reflejos a base de dar portazos (sí, habéis leído bien). De este modo, y de la mano de Flynn´s Arcade, podremos disfrutar de este juego que ya debutó en Steam en diciembre del año pasado, solo que ahora compartiendo exclusividad con la consola híbrida de Nintendo.
Saltos, carreras contra reloj, ingenio y un largo etcétera serán herramientas más que necesarias para seguir vivo en tal almacén siniestro y poder contarlo. ¿Serás capaz de sobrevivir esta noche?Todo mal empieza de noche
En Goliath Depot encarnaremos el papel de un celador/a/es, vamos, que podremos elegir el sexo de nuestro personaje o jugar con ambos en un modo multijugador local para dos jugadores. En cualquier caso la historia es la misma: en una inquietante noche, nuestro/s protagonista/s descubren unas misteriosas puertas de cuyo interior se siente emanar un gran mal. ¿Y cuál es la mejor forma de evitar que salga un mal del interior de una puerta? Efectivamente, ¡cerrándola! Así que… ¡A cerrarlas todas! ¡Es mejor prevenir que lamentar!
Y con esta sencilla premisa da inicio Goliath Depot, un arcade de pantalla única, tal como lo fueron los míticos Bubble Bobble y Pac-Man (entre otros), donde nuestro desafío consistirá en acabar los cuatro niveles que hay con sus correspondientes 10 etapas por cada nivel y enfrentamiento con jefe final incluido. Si habéis hecho matemáticas veréis que esto significa que el juego tiene la friolera de 40 desafiantes niveles, cifra que a priori puede resultar corta y poco atractiva, pero que se compensa con los modos que se desbloquean al acabar el juego (y de lo que hablaré más adelante).
La piedra angular de Goliath Depot es sin duda alguna la sencillez de sus mecánicas. El juego es bastante simple, siendo un sencillo juego de plataformas en 2D, donde hemos de ir cerrando una serie de puertas mientras esquivamos diversas amenazas. Una vez estén todas cerradas se abrirá una principal que nos sirve de acceso al siguiente nivel.
Contaremos con tres vidas iniciales con un tradicional one hit one kill donde el más mínimo roce acabará con nosotros. Afortunadamente, contaremos con un método de ataque algo peculiar, con el que al cerrar una puerta esta lanzará una onda sonora horizontal que atontará a los enemigos que alcance, y, una vez atontados, bastará con tocarlos para eliminarlos de un puntapié. Otra forma de defenderse será entrando en las puertas que estén abiertas, quedando resguardados del contacto enemigo y/o amenaza, por lo que es prudente estudiar el mapa y decidir en qué orden ir cerrándolas.
Un pequeño detalle que no hemos mencionado, para salir airosos habremos de pasar las 10 etapas que tiene cada nivel del tirón, ya que si perdemos todas nuestras vidas tendremos que volver a empezar desde el principio, vamos, desde la primera etapa.
Para facilitar la jugabilidad, en los niveles existirán una serie de monedas, opcionales pero recomendables de conseguir, que entre otras cosas sirven para, en caso de perder todas las vidas, canjearlas por un «continúe». También servirán, una vez acabado el nivel, para comprar ciertos potenciadores permanentes que nos harán el juego más sencillo brindándonos habilidades de lo más útiles, como por ejemplo el poder saltar entre niveles de arriba a abajo, hacer un mega salto o un «dash» aéreo, un gran incentivo para rejugar los niveles en pos de completarlos de forma cada vez más «perfecta».
Añadir que, al igual que en Mario vs Donkey Kong, conforme vayamos avanzando en el juego nos encontraremos con nuevas mecánicas jugables y formas de interactuar con los escenarios, así como enemigos con formas muy diversas de atacar. Y ni mencionar el enfrentamiento final con el jefe de turno al llegar a la etapa 10 de cada nivel, ¡cada uno de ellos más loco y original que el anterior!
Retro al poder
Tal vez uno de los mayores atractivos de Goliath Depot es su apartado gráfico retro, evocando los juegos que predominaban en la mayoría de los salones recreativos a mediados de los 80s y apostando por un apartado audio-visual que encantará a más de uno. Respecto a su jugabilidad decir tenemos un juego que fluye con mucha suavidad y precisión, un conjunto de baremos que consigue trasladarnos a una época donde los juegos eran más simplistas apostando por la acción pura y dura.
El apartado sonoro vibra en armonía con el apartado gráfico, con melodías de bastante más calidad que la de la época que intenta emular; aparte, serán melodías rítmicas y trepidantes y animan al jugador a aguantar hasta el final. El juego, pese a contener apenas un puñado de líneas de texto, esta traducido a varios idiomas entre los que se encuentra el español.
Incentivos post ending
Para algunos puede resultar un poco spoiler esta sección, así que todo aquel que prefiera descubrirlo por sí mismo mejor que salte al siguiente apartado. Una vez acabado el juego desbloquearemos un modo arcade puro, donde emulando las máquinas recreativas de antaño se nos anima a acabar el juego del tirón, o sea, las 40 etapas de una sola vez, sin continúes ni nada por el estilo, una tarea ardua complicada.
También tendremos un modo Speedrun donde se premiará la velocidad con que acabamos cada etapa, Y sin duda alguna el modo más interesante de todos y que dará de mucha vida al título, el modo randomizer. Este modo aleatorio nos permite jugar niveles ya existentes, pero con diversos elementos aleatorios, como la disposición de los enemigos o puertas, haciendo cada nivel único.
Aparte, podremos rejugar los niveles con un pico de dificultad extra, es decir, sin continúes, con más enemigos que se mueven más rápido y con menos tiempo para completar el nivel. A medida que consigamos acabar los niveles y si juntamos diversas condiciones, iremos desbloqueando diversos personajes con los que jugar aparte del dúo protagonista.
Conclusión Goliath Depot
Si queréis pasar un buen rato disfrutando de un juego arcade de los de antes, Goliath Depot es, sin duda alguna, una buena opción, especialmente si queréis jugarlo junto a un segundo jugador de forma local. Es increíble como un juego tan sencillo, tango a nivel gráfico como jugable, puede resultar tan entretenido. No obstante, su talón de Aquiles viene dada por su corta duración, ya que tan solo en unos escasos 60 minutos podremos acabarlo. Cierto es que posee algunos incentivos extras post-game que pueden alargar la duración del título enormemente, pero para todo aquel que solo le gusta jugar a la campaña el juego puede resultarle algo parco.
Goliat Depot ya se encuentra disponible para Steam, y a partir del 30 de mayo de 2024, de forma exclusivamente online para Nintendo Switch.
Goliath Depot
Goliath Depot os recordará a uno de esos arcades de mediados de los 80s que triunfaban en los salones recreativos
Lo mejor
- Juego sencillo de jugar
- El modo dos jugadores de forma local
Lo peor
- Muy corto
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Jugabilidad
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Apartado artístico
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Apartado sonoro
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Multijugador