Tras sobrevivir a duras penas al período favorito del incomprendido Grinch, hemos podido visualizar la última producción que Vértice 360 trae a nuestros país para aumentar nuestras dosis de tensión: The Offering (2023). Oliver Park parte de una premisa bastante conocida dentro del género, una maldición que ata a un demonio a alguien exigiéndole sacrificios, pero ofrece un envoltorio diferente con el que aporta otro imaginario con el que no estamos acostumbrados a tratar (en estas películas).
Sabiendo todo esto. ¿Hemos logrado salir de una sola pieza? ¿Entregamos a algunos de nuestros seres queridos para la merienda del «monstruo»? ¡Veámoslo!
Lo conocido vestido de algo nuevo
Art -Nick Blood- regresa a la casa de su infancia acompañado de su mujer Claire -Emily Wiseman-, la cual está embarazada de varios meses. Aunque esa visita parece buscar la reconexión entre su padre, Saul, -Allan Cordune- y él, hay motivos más personales y egoístas tras su acción: utilizar el edificio donde vive y trabaja su padre como aval para pagar sus deudas. Lo que no entraba en sus planes era liberar una entidad maligna que busca conseguir el alma de los más pequeños. Y en esa casa, solo hay una criatura que le llama la atención.
Sí, la casa del padre sirve para dormir y para «dormir eternamente»: una funeraria |
Aunque de primera podemos encontrarnos con un esquema muy similar a muchas otras obras del género, Jonathan Yunger y Hank Hoffman, creador y guionista, aciertan a recorrer un sendero nuevo que aporta algo de interés al espectador: el cambio de religión. Abandonado la explotada temática de la religión cristiana con los crucifijos y el agua bendita, se adentran en el judaísmo, aportando un nuevo imaginario del que empaparse y conocer. Aquí entrará ya el gusto y el interés de cada uno por estos nuevos referentes, aunque mentiría si no dijera que existen ciertas similitudes que se siguen sucediendo (por ejemplo, la aparición de un experto en lo maligno).
La dimensión humana de la obra se sirve para que acabes encariñándote de alguno de los personajes, pudiendo llegar a sufrir por lo que les va ocurriendo. Es por ello por lo que, en caso de que no logres conectar, te encontrarás con unos eventos que se producen según una idea que puedes tener en la cabeza. Eso sí, hay que llamar la atención sobre el final, algo que, sin dudarlo, me sorprendió para bien.
Nada que una lija no consiga arreglar. Espera, que cojo el móvil y… |
La familia no siempre es de sangre
Con todos los elementos dispuestos y una criatura deseosa de que algo ocurra, solo nos hacen falta algunos inocentes que intenten resistir los envites de la vida.
El mayor peso recae en el personaje de Art -Nick Blood-, que continuamente jugará ese doble papel de egoísta y buena persona, por lo que será fácil acabar teniendo algún sentimiento contrario hacia él. Su mujer, Claire, -Emily Wiseman-, aportará esa mirada más inocente y será testigo de todo el mal que crece a su alrededor.
Heimish es, bajo mi punto de vista, uno de los mejores personajes de la cinta |
El Saul de Allan Cordune acaba convirtiéndose en un padre entrañable y afable, queriendo que todo lo bueno le acaba pasando. Junto a él, Heimish, -Paul Kane-, actuará de protector y será una voz importante en el devenir de la película.
Destacando alguna actuación más, quizás sea llamativa la importancia de Anton Trendafilov, Yosille, o el clásico erudito de Daniel Ben Zenoy, Chayim.
Respira ese ambiente
Como ya he comentado antes, uno de los grandes aciertos en el cambiar el imaginario que rodea la película, mostrado en los escenarios y vestimentas. Aun así, no evitaremos encontrarnos con casas agobiantes, habitaciones oscuras y destartaladas, niñas que aparecen y desaparecen, etc. La mayoría de los efectos están bastante logrados, aunque llegado al punto más álgido, quizás flaquean un poco.
La viva imagen de la cordura y el saber estar |
El sonido, por su parte, se mantiene correcto, buscando agobiarte continuamente en situaciones de lo más cotidianas y rompiendo en los momentos de mayor tensión.
Conclusión
Cuando hablamos de demonios y criaturas malignas en el cine del terror, es muy fácil acabar volviendo nuestra mirada a una de las tradiciones más prolíficas en este género: la religión cristiana. Muchos todavía tenemos grabada la entrada de la casa en El exorcista (1973) o las más recientes obras del universo Warren, por lo que encontrarnos de frente con un cambio en esa estética se convierte ya en un aliciente para ver cualquier otra película. The offering consigue rodear el esquema de siempre con un nuevo papel que aporta algo de frescura, aunque puede hacerse previsible si comienzas a rascar un poquito. Con algunos personajes interesantes, la historia finaliza con satisfacción. A su vez, todo a su alrededor responde creando una atmósfera que acompaña muy bien el metraje.
The offering (2023) llegará a los cines españoles el viernes 27 de enero de 2023. Disfrutarás de ella si te gustan las historias clásicas de demonios y estás dispuesto a ver una nueva ambientación. También lo harás si quieres ver un final inesperado.