La nostalgia vende y el que quiera negarlo no tendrá más que ver la cantidad
de proyectos que han surgido en los últimos años amparados en creaciones con
cierto reconocimiento. Con esto en mente, acudimos a la
invitación de Warner Bros. al estreno de su última película Santos criminales, que verá la luz el 5 de noviembre y que se presenta como una
explicación sobre cómo se creo y creció uno de los personajes más carismáticos
de las series de este siglo: Antonio Soprano. Sí, esta película
te cuenta los antecedentes de los personajes de Los Soprano y, para ello, cuenta con Alan Taylor como su director y a
David Chase
(su creador original) como guionista, en colaboración con
Lawrence Konner.
¿Conseguirán emocionar al público con esta historia? Seguid leyendo y sabréis
nuestra opinión.
El nacimiento de un jefe
Lo importante es la familia. Eso es algo que sabemos desde el origen de
la ficción de gangsters y aquí no iba a ser menos.
Aunque el planteamiento de la película se nos presente como el aprendizaje
de Antonio Soprano,
comprenderemos pronto que el protagonismo de la misma no estará encarnado en
su personaje. Es así como empezamos esta historia con su tío Dickie Moltisanti
-Alessandro Nivola- que va a recoger a su padre, «Hollywood Dick» Moltisanti,
que llega al puerto acompañada de una jovencita italiana, Giuseppina -Michaela
De Rossi, a quien quiere tomar como mujer. Dickie, ese protagonista que
tanto fue mencionado en la serie original,
será el protagonista de la cinta,
mientras que los demás personajes tomarán un papel secundario y serán, en
muchas ocasiones, meras referencias para que los descubramos en su
pasado.
Pero continuemos…
La «alegre y amistosa» familia Moltisanti |
Estamos en 1967 y la vida en Estados Unidos está cercada por las
noticias de la Guerra de Vietnam. En Newark,
la actitud policial desencadenará unos disturbios y saqueos por parte
de los afroamericanos. Harold -Leslie Odom Jr.-, un antiguo trabajador
de Dickie, se alzará entonces contra la familia dirigiendo un nuevo
grupo de delincuentes que querrán ganar el territorio y copar el mercado.
Moltisanti dirigirá a la familia y la alzará hasta conseguir que siga
creciendo, al tiempo que sirve de referencia para un joven Tony -primer William Ludwig
y luego Michael Gandolfini- que lo tomará como un mentor para su vida.
Esta relación es la que nos han prometido con la película |
Soprano para sus seguidores
Aquí tengo que hacer un apartado antes de pasar a hablar de otros conceptos.
Una de las cosas que hay que entender cuando nos sentamos en la butaca es que
esta película es para ellos, para los fans. Podría ser definida como un
largo episodio de la serie, tiene todos los detalles que la caracterizaban. Es
por ello por lo que no será observada con el mismo prisma por una persona que
haya disfrutado de la serie o por un novicio que conozca a los personajes por
primera vez. Y quizás esto
puede llegar a crear una disparidad de opiniones entre los que acaben yendo
al cine: algunos pensarán sobre el producto que acaban de ver y otros entenderán
matices y descubrirán detalles que valorarán por encima de cualquier posible
error.
Para vosotros, seriéfilos |
Porque hay problemas en la trama. La de Harold podría haber sido más si
hubiera sido ejecutada bien, pero parece que lo quisieron incluir para darle
importancia por los disturbios y querer despistar al espectador. Y es que
ese desenlace que parecía que iba a ocurrir (pero al final no) merma mucho
el final de la historia, alzándose como un momento impactante que se desinfla con la motivación tras
el acto.
Los criminales que conocemos
Pero eso no quiere decir que nada sea reseñable. Alan Taylor, conocido
por trabajos tan dispares como Thor: un mundo oscuro o por haber
dirigido nueve episodios de la serie,
toma la dirección de la cinta, mostrando unas secuencias montadas con buen
acierto y con una fotografía que queda perfecta.
Una agradable comida familiar |
La trama, aunque lenta en algunos momentos, mantiene la forma y los temas
originales: hay violencia, hay familia, hay discusiones, hay Sopranos. Es que
esto no podría funcionar si David Chase no hubiera aceptado este proyecto
de Warner
y, por lo que parece, esta nueva relación está funcionando, pues ya se comenta
sobre una posible nueva serie dentro de esta saga. ¿Qué nos podría deparar?
Todos los italianos del barrio
Dickie Moltisanti. Ese «Santo» de buenas acciones que tan bien se
referencia en su título en inglés («The many saint of Newark«)
es interpretado por un excelente Alessandro Nivola. No es fácil su
papel, pues en sus hombros estaba el mostrar ese maestro que llevó a Tony
hasta su posición y lo consigue.
Y no es el único. Lo que nadie podrá negar es que la elección de los actores
ha sido un trabajo realizado con sumo cuidado. No solo encontramos ciertos
parecidos entre algunos con sus predecesores, sino que otros han estudiado
los tics y movimientos característicos de sus personajes y
los han llevado a pantalla dotándoles de una segunda vida.
Uno de los casos más destacados es el de Livia Soprano -Vera Farmiga
(Lorraine Warren en The Conjuring)-.
Grandísimo trabajo de Vera Farmiga |
Pero la emoción de ver cómo Michael Gandolfini actúa en el papel de
Antonio Soprano puede ser algo memorable para alguno de los fans.
El hijo de James realiza un trabajo creíble que redondea con ese parecido
que tiene con su padre.
Yo soy mi padre |
La vida antes de la Familia
Los Soprano centraban su atención en la familia criminal DiMeo
durante los últimos y primeros años del milenio, pero aquí nos retraeremos
más de veinte años desde el inicio de la serie para posicionarnos en una
época concreta. Y hay que ser sincero,
¡qué buen trabajo de recreación han hecho! Durante las dos horas que
dura la película no puedes para de observar las escenas y dejarte envolver
por un escenario donde han cuidado el mínimo detalle para que parezca
de finales de los años sesenta e inicios de los setenta.
En serio, esta casa es de los sesenta |
De ahí que también hayan incluido numerosas referencias históricas (los
disturbios de Newark) o culturales (la música de los Rolling Stones), entre
otros. Para ello, también
han tenido especial cuidado en la elección del vestuario, que no solo
localiza a los personajes en un año, si no que acaba posicionándolos dentro
de la cultura a la que pertenecen (italiana, afroamericana…).
Y con ello llega la caracterización de cada uno de los actores, sabiendo
quiénes son (los que conoces de la serie) con solo echarles un vistazo por
encima. Destacable Silvio Dante o Junior Soprano en este apartado.
La música se muestra más contenida, destacando junto al montaje en varias
secuencias donde se entremezcla acción y lirismo.
Recomiendo aquí la escena de las revueltas con el poema
The Vulture de Gil Scott-Heron narrado de fondo.
Conclusión
Y como dije, la película está llena de matices que se unen creando un
trasfondo que, cuando quieres darte cuenta, extiende sus alas y crea líneas
con el futuro (lo que ocurre con las lágrimas y un rechazo de un bebé adelanta
un acto que se cometerá en el futuro)… Y al final te paras a reflexionar.
¿Qué es esto que estoy viendo?
Esto es una vida y en una vida nada es de un solo color. No hay una
definición exacta: cualquier acción puede ser buena y mala a la vez.
Quizás por ello creas ser un demonio y acabar siendo un santo, o al
revés.
Santos criminales saldrá en los cines españoles el día 5 de
noviembre de 2021.
Si eres de los que disfrutó de Los Soprano y de lo que se quejó de
ese final, esta película será muy recomendada.