Hoy os presentamos el análisis del Shantae original de Game Boy Color (GBC), sólo que esta vez, relanzado para Nintendo Switch. Wayforward nos invita a retroceder en el tiempo hasta el año 2002 para así poder conocer los orígenes de la medio genio más famosa de todos los tiempos, aunque, en esta ocasión, en exclusiva para los poseedores de la consola híbrida de Nintendo.
¿Cómo le ha sentado el paso de los años a este título de 2002? ¿Nos sangrarán los ojos? ¿Vale la pena comprarlo? Todo eso y mucho más a continuación.
Shantae, ¡a secas!
Lo que más llama la atención es que en esta ocasión no hay coletilla, al contrario que otros títulos de la saga como son Shantae: Half Genie Hero o Shantae and the Seven Sirens, ahora es Shantae a secas, ¿el motivo? Que esta entrega se trata de la primera, cronológicamente hablando, tanto a nivel de lanzamiento como de historia, y seguramente Wayforward no era consciente de la repercusión que tendría este personaje en el mundo de los videojuegos y de cómo conquistaría el corazón del usuario medio, lanzando en un futuro más entregas de la franquicia de una forma más o menos continuada.
El juego fue de los últimos lanzamientos para la consola de Nintendo GBC, ¡y tan últimos! Salió al mercado en el año 2002, cuando ya se encontraba a la venta la nueva Game Boy Advance (2001). Debido a esto, el juego estuvo a punto de ser cancelado, pero Capcom, que vio el potencial del mismo, lo distribuyó (como hizo con otros tantos juegos de la GBC como los Zelda Oracles). Lamentablemente, el cartucho solo se lanzó en USA, privando a europeos y japoneses de su disfrute. Pese a dicha limitación geográfica y al tratarse de un juego de una generación anterior, el juego fue alabado por la crítica y usuarios por lo divertido que era y la alta calidad que presentaba.
Por si alguien desconoce quien es Shantae, a modo resumen, diré que es una simpática mestiza de humano y mujer genio, con muy buen corazón y que tiene como objetivo en su vida proteger el pueblo de Scuttletown, misión que en su día realizaban los genios de pura sangre, ya casi extintos en nuestro mundo (viven en una dimensión/reino paralelo). Tiene un grupo de amigos y archienemigos de lo más pintorescos y con mucha personalidad y carisma.
Desde el menú del juego podremos ver una galería de arte con los mapas o bocetos del juego |
Entre sus habilidades, están el poder atacar haciendo uso de su morada melena a modo de látigo, y transformarse en diversas criaturas cuando realiza un baile mágico.
Una pequeña decepción que he sufrido, es que, pese a ser la primera aventura de Shantae, el juego parte con que todos los personajes del juego ya se conocen de hace tiempo, una gran pena que no se explique cómo se conocen y el origen de su amistad.
Pocos botones para un cómodo control
Una de las grandes limitaciones de la GBC era, sin duda alguna, los controles, ya que tan solo tenía 2 botones frente a su heredera, Game Boy Advance, que tenía 4 (sin tener en cuenta START y SELECT). Dicha limitación se hace patente a la hora de controlar a Shantae, que tan solo podrá atacar y saltar haciendo uso de cada botón o andar de cuclillas para entrar en zonas pequeñas pulsando las diagonales. No obstante, también podrá correr dejando pulsado el botón de ataque mientras pulsamos un botón direccional, seguro que no es algo a lo que estemos acostumbrados, pero que sorprendentemente no resulta tan incómodo como suena, enseguida te haces a ello.
Para el uso de poderes y objetos tan solo habrá que pulsar arriba y ataque, y con Start (+) accederemos al menú de selección de objetos e información. El botón X hará las funciones del SELECT de la GBC sirviendo para hacer danzar a Shantae, de forma que realizando una sencilla combinación de botones al más puro estilo Dance Dance Revolution la transformaremos en un animal con habilidades únicas .
En el pueblo podremos acceder a un mini juego de baile al más puro estilo Dance Dance Revolution |
Algo que se echa en falta es un mapa a la hora de orientarnos, afortunadamente, en la galería del juego tendremos capturas de todos y cada uno de los mapas, que pese a no resultar muy prácticos de usar, algo ayudan. Otra gran pega es que no se han molestado en traducir los textos del juego, y cuando digo del juego no hablo solo a los in-game (que veo lógico), sino incluso a los de los menús exclusivos de Switch como el acceso a la galería o carga/grabado de estados.
El primer metroidvania de Shantae
El juego sentó bases en la saga, ya que todos los demás, a excepción de Shantae Half Genie Hero, son Metroidvanias con toques de backtracking. La exploración será fundamental, no solo para avanzar, sino para conseguir nuevos potenciadores o coleccionables.
El juego tendrá misiones secundarias/recados además de objetos que comprar en las tiendas que hay en los diferentes pueblos. Para obtenerlos, hará falta hacerse de gemas que dejarán caer algunos enemigos al acabar con ellos. Los objetos a comprar serán magias de ataque o potenciadores permanentes/nuevos ataques que facilitarán nuestra misión.
En la tienda podremos comprar objetos y habilidades permanentes |
Todas estas labores las realizaremos en el extenso mapeado que tiene el juego, que es sorprendentemente basto, cosa que no te esperabas de un juego tan antiguo y primero de una franquicia.
¡Pixelacos a todo color!
Como podéis imaginar, lamentablemente no hablamos de un remake, sino de un port de un juego de Game Boy Color, una cosa a tener en cuenta, ya lo que los gráficos y la banda sonora son los habituales de dicha consola. El juego presenta un par de opciones exclusivas para Nintendo Switch, como un sistema de grabado de partida instantáneo (tendremos tres slots para ello), acceso a una galería de arte que incluye desde bocetos, pixel art o los mapas del juego a varios modos de visualización de gráficos (entre los que hay un filtro que simula una antigua pantalla LCD pudiendo experimentar parcialmente la experiencia original si no tuviste ocasión en 2002). Por lo demás, es un juego de GBC 100%.
Shantae de GBC puede resultar algo tosco, visualmente hablando, sobre todo si jugamos en modo Dock en una TV grande, no obstante, nos encontramos con un juego que tocó cima en cuanto a exprimir dicha consola, tanto en música como en gráficos, con un scroll muy suave, unos controles precisos, melodías pegadizas y un gameplay muy divertido y que nada tiene que envidiar a títulos recientes de la saga.
Desde un ojo de 2002, el juego es una delicia visual: transparencias, scroll parallax o proyección de sombras que cambian el color de sprites al acercarse a zonas oscuras, son algunas de las cosas que más me han llamado la atención, incluso tiene, como tuvo en su momento Castlevania 2: Simon´s Quest de NES, transiciones de día/noche con sus repercusiones sobre los escenarios y enemigos incluidos. El juego tiene algún parpadeo puntual cuando hay sobrecarga de sprites en el escenario, pero era algo tan habitual en la consola Nintendo que casi se puede considerar tradición más que fallo.
Debido a que se trata de un port de un juego de GBC, es más agradable a la vista en su modo portátil, cosa que hace realmente atractivo este relanzamiento para esta plataforma.
El juego presenta un modo Game Boy Enhanced, que consiste en jugar la experiencia como si hubiéramos introducido el cartucho original en una Game Boy Advance; esto hace que el juego tenga una paleta gráfica ligeramente diferente y bonus extras, como una nueva zona que visitar o poderes.
Sonido estéreo con cuatro canales
En el apartado musical no hay mucho que añadir. Si alguna vez habéis jugado a la GBC sabréis con que tipo de melodías nos encontraremos. Pese a ser solo un chip PSG de 4 canales, la GBC cumple brindándonos melodías agradables y rítmicas con ligeros toques arábicos como si estuviéramos en un cuento de las mil y una noches. Algunas de estas melodías nos van a recordar a muchas de las tocadas en sus secuelas, por lo que podemos ver que Wayforward han continuado con el mismo estilo.
Los efectos de sonido serán los habituales en un título de estas características, sin llegar tirar cohetes, pero sin pasar totalmente desapercibidos. Casi todo en el juego, como son los golpes o explosiones tendrán su propio y característico sonido, que encajan perfectamente con cada una de las situaciones en el juego.
Conclusión
Los juegos de Shantae siempre han sido sinónimo de calidad y diversión, y hemos podido comprobar que es algo patente desde su primera entrega y si ya sois amantes de los juegos retro, ¡apaga y vámonos! Ya que será un título imprescindible para vuestra videojuegoteca, llegando con un par de interesantes novedades y a un precio muy asequible (por unos escasos 9,95 euros puede ser nuestro), eso sí, sólo en versión digital, ya que pese a existir en formato físico, se trató de una edición megalimitada, exclusiva del continente americano y muy difícil de conseguir a fecha de hoy.
En conclusión, un juego muy entretenido y recomendable si no sois muy maniáticos de los graficazos y que nos ofrecerá unas 8-10 horas de diversión.
Lo mejor
- Primera aventura de Shantae a un precio increíble
- El detalle de incluir el modo Game Boy Advance y disfrutar de sus ventajas exclusivas
- Grabar partidas en cualquier momento
Lo peor
- Que no se hayan molestado en traducir los textos
- Falta de mapa para orientarte, algo importante en un juego tipo metroidvania
- Pocos botones de acción