Con este análisis de Story of Seasons: Pioneers of Olive Town para Nintendo Switch, voy a tener muy presente y recordar a su predecesor, Story of Seasons: Friends of Mineral Town. Dicen que las comparaciones son odiosas, pero si comparando lo que destacamos es la evolución en positivo y las mejoras, ¿sigue siendo malo?
Para este título, Marvelous ha puesto toda la carne en el asador y en menos de
un año de diferencia entre el lanzamiento de las 2 entregas, el cambio es
enorme. Os invito a seguir leyendo y descubrir qué nos depara en Villa Oliva
jugando a Story of Seasons: Pioneers of Olive Town.
Bienvenidos a Villa Oliva
No voy a explicar la relación entre Harvest Moon y Story of Seasons
porque esa parte de la historia ya se comentó en el análisis de Story of Seasons: Friends of Mineral Town.
Ambos títulos empiezan de forma parecida, nuestro avatar recibe una granja en
herencia, aunque mientras en Friends en Mineral Town la casa y establos
estaban «potables», en Pioneers of Olive Town todo está, como dice el tráiler,
«para el arrastre». Concretamente comenzaremos la historia viviendo en una
tienda de campaña, ale. Menos mal que en los videojuegos no hay problema si no
se dispone de sanitarios, pero ya podrían compensar con abono gratis para la
huerta, ¿no?
El caso es que recibimos la herencia del abuelo y nuestro avatar, que debe
vivir en la miseria, se recorre kilómetros y kilómetros, haciendo noche y
todo, en una moto Vespa para llegar a Villa Oliva. ¡Pobrecita moto! Tanto
camino es demasiado para su body y acaba, como es normal, echando humo
y estropeándose a la entrada del pueblo (al menos cumplió su función.
Descanse en Paz.
RIP). Para suerte de nuestro personaje, el alcalde de Villa Oliva pasaba justo
por allí y además de hacerse cargo de la moto, nos lleva a conocer el terreno
heredado.
Haciendo noche en el bosque por cobrar la herencia |
Primera mejora: el editor de personajes
Friends of Mineral Town ofrecía un estilo chibi de personajes, esto es, para
quien no lo sepa, un aspecto más redondeado y regordete del diseño a lo
anime/manga. En el caso de Pioneers of Olive Town, como si Wataru Yoshizumi hubiera pasado por el estudio de los desarrolladores, presenta unos
personajes más estilizados, sin perder ese aire anime, por supuesto.
Una de las cosas que me ha parecido bastante curiosa, es que mientras creamos
nuestro avatar, en ningún momento se pide que se seleccione el género. Podemos
darle un aspecto masculino y seleccionar una voz que suena femenina. Creí que
los desarrolladores habían optado por pasar del género pero no, hay que
crearlo y empezar el juego: hasta que no nos encontramos con el alcalde, no
aparece la opción de elegir género, que como suele ser habitual, es binario.
Centrándonos en la personalización del personaje, las opciones han
aumentado considerablemente respecto al juego predecesor, lo cual es de
agradecer, pero no dejan de ser un montón de elementos predefinidos (muchos
tipos de pelo, de rostros, de piel, de ojos, etcétera) que se eligen y ya. No
esperéis poder aumentar el tamaño de un rasgo, subirlo o bajarlo, por ejemplo.
Tampoco es un factor negativo, hay taaaaaaaaaaaaaaaaaantas cosas por hacer en
Villa Oliva, que de verdad vais a agradecer no perder mucho tiempo en el
editor de personajes.
Por cierto, también podremos elegir el color de nuestra Vespa.
Un espacio mayor y más zonas a explorar
Sin ser un cambio abismal, Pioneers of Olive Town nos da bastante libertad de
exploración. Previamente habrá que reparar puentes o liberar accesos, pero
merecerá la pena y aporta diversidad a la mecánica general del juego. No
siempre apetece estar atareado con la huerta, oiga, también mola explorar,
descubrir más cuevas y por supuesto, extraer minerales MUAHAHAHAHA.
Bienvenid@s a Villa Oliva, donde no se pierde aceite, se recoge |
En el menú, podemos consultar el mapa de Villa Oliva. La verdad es que
respecto a Mineral Town, este mapa, aunque más ilustrado, me ha parecido peor
para orientarse. Además, eso de no poder fichar a tus animalicos en cualquier
momento como en Friends of Mineral Town, personalmente me ha
pesado.
Mapas aparte no aptos para gente con 0 orientación como yo, al empezar no
podremos acceder a todas las zonas y se hará muy amenos ir descubriendo nuevas
áreas, que además tienen otro tipo de fauna y flora, lo cual nos viene muy
bien para ir recopilando nuevos materiales y craftear elementos
distintos.
Como colofón, Story of Seasons: Pioneers of Olive Town incluye un modo online
que nos permite coger un barco y visitar la isla de otro jugador. Interesante
¿no? Desgraciadamente no he podido explorar este modo, pero me muero de ganas
de hacerlo en cuanto el embargo acabe.
La vida en Villa Oliva
¿Habéis visto? He hecho un pareado con el título XD
Como es habitual en la saga, hay vida en los pueblos (aunque tienen sus
problemas de despoblación y desarrollo económico, no creáis, lo iréis viendo a
lo largo de la historia). A medida que conozcamos a los vecinos, podremos
consultar en el menú nuestra relación con ellos y el «y tú de quién eres», a
la izquierda de la mini descripción del árbol genealógico del vecino o vecina
en cuestión, aparece una línea de corazones que se irá llenando a medida que
desarrollemos nuestro contacto con ellos. Si hay algún habitante con el que
todavía no nos hemos encontrado y por tanto, no conocemos, en vez de su foto,
veremos una interrogación.
Por cierto, fijaos en el color de los corazones, los de unos personajes son de
color más anaranjado y los de otros, más rojizo… ¿qué significará el tono de
color? Guiño, guiño.
Otra mejora que quiero destacar es la narrativa. La verdad es que en Friends
of Mineral Town, es más complejo activar escenas y tienen menor frecuencia. En
Pioneers of Olive Town, es grato descubrir que, una vez avanzado hasta cierto
punto del juego, se activan bastantes escenas cuando caminamos por la villa,
que nos dan información de cómo son nuestras vecinas y vecinos, y también
aportan escenas de humor.
Una en concreto, y voy a decir un pequeño spoiler por lo que
si no queréis leerlo, saltaos este párrafo, me hizo bastante gracia porque un
vecino nos pide que le saquemos la cartera del mar, que está en mal estado, pero nuestro personaje lo ignora y el necesitado vecino no parece interesado
en advertirnos. Cuando nuestro avatar se adentra en las aguas para rescatar la
cartera, solo se ven burbujas y finalmente, el vecino debe pedir ayuda para
que nos rescaten de ser ahogados. Al menos encontramos la cartera antes de
perder el conocimiento y nos sacan del agua con ella.
Como en otros stories of seasons, en el pueblo hay tiendas donde
podemos comprar desde semillas y ganado, a productos ya elaborados si nos da
mucha pereza crearlos o no encontramos un material determinado. Eso sí, previo
pago bastante más alto de la materia prima y de nuestro propio precio de
compra.
El alcalde nos preguntará y pedirá ayuda a menudo para fomentar el turismo y
desarrollo económico en la zona. A medida que se avanza, seremos testigos de
cómo aumenta el turismo y se abren nuevas tiendas en las que también podemos
dejarnos los dineros. Tras 5 callos en las manos de darle a la azada sin
parar, no está de más emplear el dinero ganado honrada y sufridamente en algún
caprichillo que otro.
A lo largo del año, habrá días especiales donde en el pueblo se reúnen todos
los habitantes para celebrar algo en concreto. Son actividades secundarias
opcionales que además de darnos una desconexión de la rutina jugable de la
granja, son otra oportunidad más para acercarnos a nuestros congéneres.
Jugabilidad
Como he comentado, hay muchas actividades para hacer en Story of Seasons:
Pioneers of Olive Town. Pero no le tengáis miedo, si bien abrumaría que nos
las contaran todas de seguido, el juego gestiona muy bien que vayamos
aprendiendo con apenas una pantalla de tutorial.
Comenzamos a jugar y tendremos algunas herramientas de labranza que nos
entrega el alcalde, pero no serán todas las que tendremos al final de nuestro
aprendizaje. A medida que vamos trabajando en la granja y acostumbrando al uso
de cada una, irán apareciendo personajes que nos irán dando más herramientas
(desbloqueándola así).
Chamizo con el que empiezas vs cabaña conseguible con trabajo duro |
No es un secreto que en este juego, nos hacemos cargo de una granja pudiendo
fundar una gran explotación ganadera y agrícola. Nada más empezar, el juego
nos dará a escoger entre dificultad fácil o normal, que básicamente se
diferencian en qué nos apetece más ¿disfrutar de la granja, exploración y el
día a día con el vecindario, o probar nuestra capacidad de gestión y
crafteo? Sea cual sea nuestro objetivo, disfrutaremos del juego
igualmente.
Además del mundo ganadero y agrícola, podemos amasar nuestra fortuna yendo a
la mina a excavar, pescando y, algo muy interesante, cumplir misiones del
ayuntamiento entregando materiales que piden los vecinos y por los que nos
darán un buen pellizco de dinero. También, a medida que desbloqueemos logros,
podemos recoger premios en el mismo ayuntamiento, como medallas que podemos
vender, también a buen precio.
La excavación y la pesca han variado un poquito respecto al juego predecesor.
En la mina, solo hará falta cavar en las zonas de tierra brillante y con el
mazo, no solo romperemos piedras, también picaremos paredes brillantes de
donde brotarán más minerales. La pesca sí que se ha vuelto un poco más
compleja, donde habrá que hacer un baile de resistencia con el pez, un poco
parecido a cómo se pesca en Sea of Thieves con la salvedad de que en
vez de cansar el pez con el joystick, hay que machacar el botón cuando
éste se muestra en color blanco.
Cuando ganemos lo suficiente para permitirnos una cocina, podremos fomentar
nuestro arte culinario. Aconsejo ir guardando alguna pieza de lo que se vaya
sembrando o encontrando, a más recetas cocinadas, subiremos de nivel esa
habilidad, desbloqueando, como con el resto, recompensas y más recetas.
Como punto negativo, debo decir, nuevamente comparando con Friends of Mineral
Town, que las acciones como cavar o regar, se han vuelto como más sensibles y
cuesta atinar bien, no es difícil que acabemos regando 2 veces el mismo
cuadrado sembrado o en tierra no arada. Con el anterior juego, la malla estaba
mejor definida, no había cambios de rasante en el terreno y era mucho más
sencillo, a la par que ameno, cavar, sembrar, regar, etcétera.
Apartado gráfico y sonoro
Para gustos, colores, pero a mí personalmente me ha gustado mucho que
abandonen el estilo chibi, me ha parecido un acierto, aunque no
abandona el aire anime más aniñado que adulto. El juego en general es muy
colorido, rozando lo pastel en algunas zonas. Es muy agradable pasear por la
villa o explorar por los diferentes paisajes, sin ser los gráficos más
detallados y elaborados de la historia de los videojuegos, son lo que se pide
para un título como éste, todos los elementos se combinan en armonía y ninguno
desentona. Marvelous se ha reservado los detalles más trabajados para
la jugabilidad, pero no por ello ha quedado descuidado el aspecto gráfico.
Aprobado alto.
Mejor valoración que el apartado gráfico me ha parecido el sonoro. La
música nos acompañará acorde en función de si estamos en una escena
narrativa o en un escenario concreto. Junto con la parte jugable, es uno de
los elementos que mayor inmersión nos da. A ella le acompañan los
efectos de sonido, que son muchos y muy divertidos. Hablo de los
soniditos que emiten los animales, que se producen al ejecutar una acción o
las propias voces (guturales e inentendibles) de los vecinos y vecinas.
Conclusión
Story of Seasons: Pioneers of Olive Town es un juego muy adictivo que
cuando menos nos demos cuenta, le habremos echado cientos de horas. Pese a sus
múltiples posibilidades, Marvelous ha conseguido una curva de adaptación
jugable excelente, consiguiendo que aprendamos todas las funciones sin apenas
darnos cuenta.
Muy recomendado para aquellos a quienes les gustan los juegos como
Harvest Moon o
Animal Crossing. Desaconsejado para aquellas personas que no les atrae nada ni el
crafteo ni el farmeo XD
Saldrá a la venta el día 26 de marzo en la Nintendo eShop y en formato físico. Si os gusta el juego y estáis pensando en comprarlo, os dejo un enlace a Amazon donde poder hacerlo.
Lo mejor
– Un montón de cosas por hacer
– Muy ameno y adictivo
– La narrativa más cuidada
Lo peor
– El control mientras se trabaja la huerta
– El mapa, ilustrativo, pero poco útil