AVISO SPOILER: Para este artículo destriparé parte de la historia, especialmente de los Actos II y III; ergo, en caso de no querer spoilers, te recomiendo dejar de leer. Dicho esto, lee por tu propia cuenta y riesgo.
Antes de empezar, os explico la idea de ésta entrada más detalladamente. La RAE define autoritarismo como «Régimen que ejerce con exceso su autoridad o abusa de ella«. Los primeros que nos vendrían a la cabeza serían; las dictaduras (tipo de gobierno autoritario) de Francisco Franco y Adolf Hitler. Sin embargo, en las sociedades medievales/feudales este tipo de gobierno estaba a la orden del día y es aquí donde hablaremos de uno de ellos, el shogunato, que es un gobierno militar autoritario.
«El autoritarismo es una degeneración de la autoridad en la que la obediencia de los subordinados se logra sin un consenso, mediante la imposición y la restricción de la libertad.» – Claudia Ortiz, 2014
Explicado el concepto, más adelante expondré cómo era el shogunato y el código del guerrero al que los samuráis se debían, intercalando momentos de la historia de Ghost of Tsushima para ir esbozando una conclusión. Esto se debe a que con su historia, una en la que el samurái acude técnicas de asesinato para salvar a su pueblo, se pone en tela de juicio el Bushidō y por consiguiente el régimen autoritario del Shogunato, que se sostiene tras una tapadera de un código ético gracias al cual el pueblo no se subleva, porque creen que los samuráis son sus «caballeros de brillante armadura», manteniendo así un control exacerbado sin mayor queja por parte del pueblo nipón feudal, en contraposición a otras sociedades de la época, principalmente las europeas.
ACLARACIÓN: Soy consciente de que ha mucha gente no le gusta el término feudal por asociarse más a occidente, pero lo voy a usar por ser más cómodo para el lector medio.
ACLARACIÓN: Realmente no estoy diciendo que los europeos eran unos revolucionarios, ni que los japoneses fueran unos conformistas, sino que a primeras vemos que históricamente uno tira más hacia un lado y el otro al contrario.
Japón a día de hoy
Está claro que el país del sol naciente se ha hecho realmente famoso en la
última década y a raíz de esto, se han viralizado muchas imágenes y vídeos que
nos han hecho creer que Japón es un país donde básicamente no se juzgan la
mayoría de tus acciones. Sin embargo, esto está realmente lejos de la realidad
y lo que en verdad hemos visto, son salones del manga o jóvenes haciendo el
«canelo» cosa que pasa en todos los países, ya que en esos contextos dichas
acciones se quedan en simples gracias.
Ahora bien, actualmente la sociedad japonesa es una sociedad muy estricta que
pende mucho de la opinión ajena y de lo que supone la labor personal (trabajo
y ayuda comunitaria). También es muy rigurosa con el tema de los delitos, y
cometer uno y que te descubran, supone que todo el mundo, incluso los más
allegados, te den la espalda, (sea por lo que sea). Sacamos en claro
una sociedad exigente en la que el trabajo es lo primordial y que
perderlo, puede suponer el fin mientras
viven aparentando una fachada diaria que solo de puertas adentro
desaparece,
y la cual si se rompe, puede suponer un suplicio.
Mientras buscaba información, he visto que a día de hoy el código ético del bushidō se sigue llevando. Evidentemente, no como un guerrero que arriesga su vida, sino como una forma de llevar una vida honorable y ayudar al prójimo. Dicho ésto, la intención de este apartado era dar una pequeña referencia de la sociedad actual, ya que veremos más adelante que en el Japón del s.XIII, los samuráis que se regían por el bushidō, daban mucha importancia a las apariencias y a su labor como guerreros, además de cometer un ritual de suicidio conocido como el seppuku o harakiri si fallaban en ciertos aspectos de su vida.
DATO: Entre los aspectos por los que más se conoce a Japón es por su cantidad de suicidios (aunque no es el que más tiene en el mundo como se cree), siendo en 2018 el 5º país con más suicidios de Asia: 16,20 personas por cada 100.000. Se conoce que en los adultos, muchos se deben al despido o quiebre de su empresa o problema en su vida social.
Mientras buscaba información, he visto que a día de hoy el código ético del bushidō se sigue llevando. Evidentemente, no como un guerrero que arriesga su vida, sino como una forma de llevar una vida honorable y ayudar al prójimo. Dicho ésto, la intención de este apartado era dar una pequeña referencia de la sociedad actual, ya que veremos más adelante que en el Japón del s.XIII, los samuráis que se regían por el bushidō, daban mucha importancia a las apariencias y a su labor como guerreros, además de cometer un ritual de suicidio conocido como el seppuku o harakiri si fallaban en ciertos aspectos de su vida.
DATO: El seppuku podía ser cometido a causa de una derrota en la guerra, la expiación de un pecado, hacer pública una protesta, mostrarse en oposición hacia algo importante, mostrar inocencia o acompañar a un señor en la muerte,
El Japón Feudal
Ghost of Tsushima se desarrolla en el s.XIII con la primera invasión mongola a Japón. El juego cuenta que 80 samuráis liderados por Jito Shimura, lucharon contra hordas de mongoles hasta que cayeron todos y cada uno salvo el propio Shimura y uno de sus samuráis, su sobrino Jin Sakai, quien se convertiría en el protagonista del juego, liberando Tsushima. Sin embargo, la realidad es más nefasta y si bien Tsushima fue uno de los focos principales de lucha contra los mongoles, el desastre fue mucho peor y los 80 samuráis perecieron al igual que su líder, Sō Sukekuni (efectivamente Shimura es personaje 100% ficticio, cuyo correspondiente real no sobrevivió).Según el momento en el que el juego tiene lugar, el gobierno que existía era el shogunato Kamakura; ergo, estamos en el periodo Kamakura. El shogunato es un tipo de gobierno militar autoritario, siendo éste el primero de todos los shogunatos que habría en Japón, y el shōgun que gobernó durante los eventos del juego, fue el Príncipe Koreyasu, el séptimo y antepenúltimo shōgun Kamakura. Entonces es Koreyasu el que impone la orden arresto y de muerte hacia Jin durante el Acto III.
El shogunato como podemos ver en el juego y en los fragmentos de historia que han quedado, se basa en la relación señor-vasallo, similar a la idea de la Europa Feudal, pero ensalzándola más románticamente, lo cual unido a todas las relaciones políticas, militares y económicas de sus líderes, además de los códigos y normas de la sociedad en ese momento, hace que se cree un modelo de sumisión perfecto para un gobierno autoritario, ya que no va a ser tan habitual la duda y por ende, el intento de rebelión. De hecho, parte de esta idealización se debe a los orgulloso guerreros del Japón feudal, los samuráis, quienes seguía el bushidō o el camino del guerrero, que se basaba en el honor.
Japón en Tsushima
Dicho esto, entramos ya directamente en Ghost of Tsushima. Como comentaba, el
juego inicia con la batalla de los 80 samuráis en la playa Komodahama. Tras
ser derrotados, Jin Sakai es salvado por una ladrona, que será quien dé inicio
al dilema moral que le carcomerá a lo largo de los dos primeros actos. Dicho
dilema es lo que inicia la crítica, ya que
Jin debe elegir si decantarse por el honor del samurái, comportándose
como tal, a costa de perder más vidas o si por el contrario,
decide usar técnicas de asesinato repudiadas por su tío, el shōgun
y demás samuráis, pero consiguiendo que más gente salga ilesa. Dicha
situación lo que provoca es un cuestionario de creencias interno en Jin, ya
que todo aquello en lo que creía, podía estar equivocado.
A lo largo del Acto I Jin alterna dichas tácticas, pero se ve muy reticente hacia las «oscuras». Es entonces que tras liberar a su tío al final del acto, Shimura le dice que debe dejar dichos métodos. Cosa que es coherente ya que Shimura era el Jito de Tsushima (los jito eran lugartenientes nombrados por el shōgun del momento) y su sobrino no podía ser conocido por usar artes tan «vulgares», de rateros y asesinos.
En Jin y Shimura tenemos nuevamente la relación señor-vasallo (aparte del familiar), ya que esa conexión no solo era con el pueblo llano, sino también entre la clase alta. Siendo este caso entre el jito y sus samuráis, por lo que no se podía permitir que los vasallos de un escalafón inferior (la clase baja), vieran que sus «protectores« actuaban de esa manera, ya que pondría en entredicho el liderazgo del shogunato y podría hacer pensar al pueblo que quizá hay otro modo. Como tal, esto se ve entre mediados y finales del Acto II, en el que nos encontramos a un NPC que parte hacia el norte para proveer de suministros al ejército del Fantasma (ejército que no existe) y Shimura comenta a Jin que esto debe terminar, porque a quien deben de seguir es a los samuráis, al jito y al shōgun.
A lo largo del Acto I Jin alterna dichas tácticas, pero se ve muy reticente hacia las «oscuras». Es entonces que tras liberar a su tío al final del acto, Shimura le dice que debe dejar dichos métodos. Cosa que es coherente ya que Shimura era el Jito de Tsushima (los jito eran lugartenientes nombrados por el shōgun del momento) y su sobrino no podía ser conocido por usar artes tan «vulgares», de rateros y asesinos.
En Jin y Shimura tenemos nuevamente la relación señor-vasallo (aparte del familiar), ya que esa conexión no solo era con el pueblo llano, sino también entre la clase alta. Siendo este caso entre el jito y sus samuráis, por lo que no se podía permitir que los vasallos de un escalafón inferior (la clase baja), vieran que sus «protectores« actuaban de esa manera, ya que pondría en entredicho el liderazgo del shogunato y podría hacer pensar al pueblo que quizá hay otro modo. Como tal, esto se ve entre mediados y finales del Acto II, en el que nos encontramos a un NPC que parte hacia el norte para proveer de suministros al ejército del Fantasma (ejército que no existe) y Shimura comenta a Jin que esto debe terminar, porque a quien deben de seguir es a los samuráis, al jito y al shōgun.
NOTA: Aquí encontramos otra relación con el Japón actual, ya que los samuráis se tomaban muy en serio su trabajo, al igual que la media de los japoneses actuales, y esperaban una recompensa de respeto por parte del pueblo, al igual que un trabajador medio por parte de su familia, solo por el hecho de trabajar (obviamente aparte de la recompensa económica). Esto sustenta la idea de la importancia del trabajo para los nipones indiferentemente de las épocas. Aparte de que cuando un samurái fallaba, como ya comentamos, cometía seppuku, se conoce que muchos de los suicidios de adultos en Japón suceden tras perder el trabajo, aunque sí que es cierto que no son tan comparables debido al factor mental por el que se comenten ambos suicidios.
NOTA II: Es de conocimiento popular que muchos japoneses se suicidan en el bosque de Aokigahara o bosque de los suicidios, lo cual se podría ver, especulando, como que dicho suicidio tiene cierto componente de «ritual.»
Sin embargo Jin acaba haciendo caso omiso de lo que dice su tío, ya que para él, el honor es salvar a su pueblo a toda costa. Nada de mantener las apariencias, apariencias que reitero, servían para engañar y así sostener la sumisión del pueblo, manteniéndose como figuras salvadoras. Viendo dicho pensamiento, lo que nos damos cuenta es que, aunque Yuna repercutiera mucho enseñándole las técnicas, Jin ya tenían una concepción del honor, elemento fundamental para un samurái, que distaba mucho de la que tenían Shimura, el shōgun u otros samuráis.
Bushidō
El bushidō o camino del guerrero, es un código moral que fue creado con el origen de los samuráis (estos también son llamados bushi), que se basaba en siete pilares fundamentales, de los que hablaré con el fin de enlazarlos con los eventos de Ghost of Tsushima, las actuaciones de Jin y las reacciones de Shimura y el shōgun, para ir comparando y reflexionando con el fin de entender todos los puntos. También he tomado algunas citas de Confucio, que tuvo mucho peso en los samuráis.- – Yi (Justicia o Rectitud): El primer punto del bushidō se basa en lo que un samurái considera o no justo, es decir, el concepto que tiene el propio guerrero de justicia que debe impartir y la rectitud que supone hacerlo. De aquí se llegan a aspectos extremos tipo «saber», cuándo uno debe o no morir, o cuándo ceder o no por aquello que es justo. Aquí contemplaríamos el harakiri que antes mencionaba.
- Jin decide envenenar a los mongoles al final del Acto II, a pesar de saber que su tío le iba a reprender, cuando de no haberlo hecho, habría sentenciado a la muerte a muchos guerreros, según vemos lo que les esperaba en zona mongola. Aquí observamos que el punto de «cuando uno debe morir», siendo Shimura el que dice, que es mejor morir a haber usado veneno. Cosa que para él es cierto, porque él no iba a ser quien estuviera en primer lugar durante el avance por el puente.
- – Yu (Coraje): Herramienta que todo soldado debe poseer para defender a los suyos.
«Percibir lo correcto y no hacerlo demuestra falta de coraje.» – Confucio
- Aquí debemos plantearnos la rencilla entre Jin y su tío sobre lo que es el coraje, siendo que éste último considera que actuar en las sombras, está falto de coraje y por tanto, insulta lo que supone ser un samurái. Sin embargo, si nos atenemos a las palabras de Confucio, nos encontramos con que lo que Jin hace, es lo correcto, salvar a los suyos; ergo, tiene coraje. Sin embargo, eso lo tachan de cobardía porque no era acorde a lo imagen que querían dar de guerrero valeroso de brillante armadura.
- – Jin (Benevolencia): Esta virtud es aquella que todo gobernante, soberano u otro debe tener, teniendo en cuenta que lo que demuestra es transigencia hacia ciertos actos de otros. Sin embargo, los gobiernos autoritarios como los shogunatos no demuestran en muchos casos dicha benevolencia. Siendo que esta situación se les volvía a llenar la boca con el concepto del honor para excusarse.
Según Confucio la benevolencia se basa en amar a otros.
- Literalmente el nombre de nuestro protagonista es benevolencia y eso nos puede ya dar ciertas indicaciones de las intenciones de los creadores. Aunque use tácticas de asesinato, su meta es salvar a los ciudadanos de Tsushima, a pesar de las obvias consecuencias. Sin embargo, Shimura y el shōgun demuestran por la orden de arrestar a Jin y posteriormente con el intento de Shimura matar a su sobrino en un duelo, que la benevolencia no fluye en ellos.
- – Rei (Respeto): Un samurái de mostrar respeto tanto dentro como fuera del campo de batalla, tanto por sus aliados como por sus enemigos. El samurái no debe mostrar arrogancia, ni comportarse indecorosamente, ya que en ambos casos, se consideraría falto de cortesía, es decir, una falta a otros.
- En este caso nos encontramos que sí que Jin falta por completo en el campo de batalla, mientras que Shimura, al igual que otros samuráis, muestran ese respeto (del que se aprovechan los mongoles), yendo siempre de frente y recriminando las acciones de Jin, como cuando lanza unos dardos para desangrar en el Acto II. Sin embargo, vemos una contradicción con la benevolencia, ya que el propio respeto los hace ir de frente aunque sea de cabeza a la guarida del lobo, lo que hace que veamos falta de benevolencia porque llevan a sus soldados sin dudas a la muerte.
- – Makoto (Honestidad): Éste es un punto esencial que se podría considerar precursor del anterior, ya que la sin honestidad, el respeto y la cortesía, se vuelven una farsa que esconde lo que de verdad pensamos. Es por ello que una persona falta de sinceridad, falta a la propia dignidad, cosa que un bushi no se puede permitir.
«La sinceridad es el principio y fin de todas las cosas; sin sinceridad no habría nada.» – Confucio.
- Viendo el concepto de la honestidad, nos damos cuenta que quizá el Rei no sea tan bien seguido por el Jito y los demás como parecía. Observamos que los samuráis hablan de su honor y como deben mostrar respeto, pero cuando Jin hace lo que hace y argumenta el por qué, sólo saben responderle que no debe, porque no es honorable, sólo vemos argumentos fútiles. Entonces es cuando nos damos cuenta de que esa falta de argumentos, se debe a la incapacidad de poder refutar sus propias acciones, como se puede ver en los diálogos del Acto III antes y después del duelo entre Shimura y Jin, ya que lo que de verdad ansían, es mantener su estatus.
- – Chuugi (Lealtad): La lealtad del bushidō no es general, sino que habla de la fidelidad del guerrero o seguidor hacia su señor por encima de todo. Incluyendo cualquier acto en combate o en descanso, que pueda repercutir para mal a su señor como acto de deslealtad.
- En este caso no hay mucho que decir. De dicha lealtad se le llena la boca a Shimura y los demás samuráis, importándoles absolutamente bien poco lo que pueda acarrear eso. Cosa normal, ya que si se mantienen fieles, tendrán sus privilegios, aunque sea a costa del pueblo.
- – Meiyo (Honor): Por fin llegamos al valor más importante de los bushi y que he repetido incesantemente a lo largo del post. El honor se basa en la rectitud, el valor propio y vivir con dignidad, aspectos que popularmente siempre han calificado a los samuráis. Sin embargo, no es oro todo lo que reluce y está claro que dicha idealización hacia los señores que impartían orden en un gobierno militar autoritario, resulta un tanto escabrosa, al igual que los «valientes» caballeros europeos de la Edad Media.
- Está claro que por la concepción general del honor, Jin no actúa con honor. Shimura le reprende desde que es salvado en el Acto I y a lo largo del Acto II, para acabar siendo su juez e intento de verdugo en el Acto III. El problema aquí es que el honor se ha ligado siempre a actuar de cara en cualquier situación, incluso si los demás se ven perjudicados. Ejemplos de ello son la lucha en la playa de Komodahama, los planes de Shimura de querer hacer un ataque frontal al final del Acto II o la intención de ir directos a por los mongoles al final del Acto III, sin tomar medidas estratégicas que supongan otros enfoques.
- Por su parte y como podemos ver en un flashback, Jin siempre ha definido el honor como defender a otros. Realmente no es la definición ideal, ni se acerca a la correcta, pero sí que demuestra un honor basado exclusivamente en su amor por su gente y no por una posición social llena de lujos
DATO: Actualmente Japón está en una monarquía parlamentaria al igual que España, pero en vez de tener un rey, tienen un emperador.
Conclusión
Se desconoce realmente cuál era la intención de los creadores, aparte
de hacer una obra de arte, ya que el juego lo que principalmente nos quiere
mostrar es la historia de Jin Sakai y lo que los eventos le han llevado a
convertirse en El Fantasma. Sin embargo, visto todo lo expuesto,
está claro que queriendo o no,
hay una crítica bastante clara hacia el autoritarismo samurái o más
bien, hacia lo que suponía el gobierno militar autoritario del Shogunato, ya
que los samuráis solo eran guerreros nobles a su servicio.
Puede que no sea tan clara dicha crítica hasta que repasamos un poco la historia, los gobiernos autoritarios y el bushidō, pero tras ellos, vemos que es bastante fuerte. Es más, yo mismo percibí dicha detracción a lo largo del juego, ya que Jin pone muchas veces en tela de juicio las creencias de Shimura y lo que supone ser un bushi, pero hasta que no investigué para hacer este reportaje, no pude ver todo lo que suponían realmente estos guerreros para la sociedad japonesa feudal y todo lo que estaba suponiendo en el juego Jin.
Puede que no sea tan clara dicha crítica hasta que repasamos un poco la historia, los gobiernos autoritarios y el bushidō, pero tras ellos, vemos que es bastante fuerte. Es más, yo mismo percibí dicha detracción a lo largo del juego, ya que Jin pone muchas veces en tela de juicio las creencias de Shimura y lo que supone ser un bushi, pero hasta que no investigué para hacer este reportaje, no pude ver todo lo que suponían realmente estos guerreros para la sociedad japonesa feudal y todo lo que estaba suponiendo en el juego Jin.
Fuentes:
- – Ortiz, Claudia. «El autoritarismo» en repo.funde.org, 2014.
- – Estadísticas de Suicidio en datosmacro.com, 2018.
- – Avellana, Laura Tomás. «Cinco mentiras sobre el suicidio en Japón» en japonismo.com, 2014
- – Adelstein, Jake. «Japan’s suicide statistics don’t tell the real story» en japantimes.co.jp, 2013
- – Galindo, Arturo. «El seppuku, la despedida del samurái» en historia.nationalgeographic.com.es, 2017.
- – López-Vera, Jonathan. “El periodo Kamakura (1185-1333), primer gobierno samurái” en HistoriaJaponesa.com, 2013.
- – Turnbull, Stephen. «Viento divino. Las invasiones mongolas en Japón» en Desperta Ferro Antigua y medieval n.º 11, 2012.
- – Gavaldà, Josep. «Aokigahara, el bosque de los suicidios» en nationalgeographic.com.es, 2020
- – Nitobe, Inazō. «bushidō, el espíritu de Japón«, un ensayo clásico sobre la ética del samurái, 1905.
- – Kasaya Kazuhito. «Bushidō: la base ética del espíritu japonés» en Nippon.com, 2019.
4 comentarios
Siempre expusieron su cultura historia con mucho empeño, y celebro que así sea
Ciertamente es un tema interesante.
Ni mucho menos! la mayoría de lo sacado aquí es wikipedia, pura y dura, el bushido nace por Inazo nitobe a un año del S. XX un libro directamente en inglés y publicado en Nueva York¿significa esto que los samurái no tenía un código de conducta? Pues almenos, no uno único y global para todo el territorio, pues cada clan dictaba como debían ser sus subditos, y no tenía porque ser igual en el clan de al lado. Lo más cerca que estuvieron de la unificación fue ya en el último periodo samurái, el periodo Edo, y aún así, no se logró, pues los clanes más alejados de la capital actuaban según sus normas.Otro punto no acertado del juego es el de que, si adoptas un estilo, como el del "fantasma" pierdes el honor, especialmente durante el Sengoku, el oficio del shinobi era popular, llevado acabo principalmente por samuráis, los que a su vez es posible que usaran a otras personas, la gente se arriesgaba a este oficio, pues un campesino podía acabar como Shogun (aunque es cierto que esto se prohibió en el periodo Edo, de tal forma que si nacías campesino, morías campesino, curiosamente ante un shogun que nació campesino, por lo que todas las escuelas shinobi, se extinguieron) Entonces, ¿el juego es una critica al autoritarismo? Más bien el juego es pura publicidad para el país, al igual que los ninjas y el bushido.
Ante todo, no hay nada sacado de la wikipedia. Mis fuentes están al final, las puedes comprobar, cosa que yo no puedo comprobar de ti, que aparentas sacártelo todo de la manga.
“Bushido, el espíritu de Japón” es un libro de Inazo Nitobe, obra y autor, que menciono como mis fuentes (me hace pensar que has echado solo un vistazo) y del cual saco los principios de los que hablo. El bushido es algo que existió antes de él, pero aprovechando su conocimiento y el origen de su familia, ese libro era el más idílico para crear.
Por otro lado, estás mezclando la unificación con el código de conducta, cuando yo de lo que estoy hablando es que la imagen que se nos ha dado y dejado a nivel histórico. Usándome de las fuentes, que nuevamente te invito a consultar, he sacado una conclusión entre lo mostrado en el juego y la información que he obtenido.
Por otro lado hablas del periodo Sengoku que se comprende entre los siglos XV y XVI, siendo que Ghost of Tsushima se desarrolla en el s.XIII. De todas formas, fuera de que es curioso usar el periodo Sengoku como referencia, siendo un periodo que históricamente flojea en información (normal, es un periodo de agitación política y militar) hasta el punto de que cada web o libro patinan un montón las fechas, yo estoy hablando de la imagen que se intentaba dar al pueblo (la cual en cierto modo es la que nos ha llegado a nosotros).
No tacho la existencia de una especie de trabajo “shinobi”, pero puestos a sacar el tema, sí que remarco nuevamente la cara que se daba al pueblo, tomando el “oficio” shinobi para hacer tareas oscuras (contratados por el imperio para intereses propios) y mantener su apariencia. Por algo se les llamaba los asesinos invisibles (aunque las películas y demás se hayan tomado el termino invisible, demasiado al pie de la letra la palabra invisibles).
Además, aunque el concepto shinobi se presupone que existe desde hace mucho, siendo punto culmen y álgido es el siglo XV, cosa que evidentemente repercute, eran como bien dices Samuráis. Es más, se saca más o menos en claro que los conceptos Shinobi y Ninja son ficticios, naciendo de estos encargos del imperio y siendo targiversados por los medios audiovisuales del s.XX y el s.XXI.
Por ahora me despido, no sin antes dos cosas. La primera es que te animo a que cuando vayas a hablar mal de trabajo de una persona, te lo leas primero y lo compruebes, ya que, viendo lo que me dices, me hace pensar que has ido con una idea preconcebida de mi artículo o que solo lo has leído por encima.
Segundo, cómo nuevamente me tacharas de embustero, te dejo las fuentes que he usado para responderte:
Un poco de información sobre el periodo Sengoku: https://www.greelane.com/es/humanidades/historia-y-cultura/what-was-the-sengoku-period-195415
Jornadas de Fundación Japón en Madrid a la que acudió un investigador de la Universidad Mie https://www.esjapon.com/el-origen-de-los-ninja-5152
Hablando del mito ninja https://www.muyhistoria.es/edad-media/articulo/ninjas-la-verdad-sobre-los-espias-del-japon-feudal-321566303595#
Esta de regalo: Los ninjas no existen (un conjunto de bibliografías relacionadas con el oficio Samurái) https://www.historiajaponesa.com/la-verdadera-historia-de-los-ninja/