Hoy os traigo el análisis de Saints Row IV: Re-Elected para Nintendo Switch. Lanzado en 2013, Saints Row IV es hasta la fecha la última entrega numérica de la serie. Un juego cargado de acción, risas, contenido sexual, ideas incoherentes y realmente casi cualquier cosa que se te pueda pasar por la cabeza, y que ahora podremos disfrutar en cualquier lugar gracias su versión de Nintendo Switch.
Nuestra misión, la del presidente de Estados Unidos
Usted, presidente de los Estados Unidos de América, debe salvarnos a nosotros de la fatal amenaza que asola el mundo, la invasión alienígena liderada por el déspota Overlord Zinyak. Así que, con ayuda de sus compañeros, deberéis sembrar el caos en la ciudad ficticia que ha creado este ser y volver sus planes contra él para que esta simulación acabe de una vez por todas y podamos volver a nuestra vida normal. Es un argumento clásico americano, nada del otro mundo, pero que por su dirección basada en la comedia y lo «bizarro» de sus escenas, pasa a ser una historia surrealista, irónica y muy absorbente.
En cuanto al desarrollo de la historia, no hay mucho que decir de un juego que salió en 2013, de lo que ya os hemos comentado antes.
Salvemos el mundo de unos marcianos locos
Por desgracia, el apartado de jugabilidad es en el que menos destaca Saints Row IV: Re-elected. Al igual que su predecesor hace siete años, los errores que encabezaron este juego, siguen presentes en la nueva edición y además, se han hecho de notar unos cuantos más. Sin embargo, no todo son decepciones. Viajar por Steelport con tus poderes en la versión portátil Nintendo Switch, se ha convertido en una auténtica gozada. Principalmente porque en este modo, el juego ha ganado mucha más verticalidad, lo que da mayor sensación de control y altura durante lo saltos impulsados por tus poderes.
Conectando con el desplazamiento. Tenemos que, el juego funciona bastante bien por toda la ciudad escojamos un modo u otro. Lo peor durante nuestras carreras son los errores en el sistema de detección de colisiones, que hacen que aterrices a 10-20cm por encima del suelo o que choques contra la pared a dos metros, además de los problemas en el arranque de los coches. Si bien, éstos están nublados en el juego a causa de los poderes del protagonista, las pocas veces que lo usemos, nos encontraremos con una ruleta rusa que decidirá si el coche arranca en condiciones o lo hará a trompicones, lo que a la larga hace que avancemos por la carrera en picos de velocidad.
En el combate, la cosa no mejora mucho. Es probablemente el aspecto con más controversia, ya que de por sí, como pasa con muchos ports, el apuntado en Switch no precisamente cómodo y Saints Row IV: Re-Elected no es la excepción que confirma la regla. Para más ende, el juego tiene inconvenientes al mover la cámara correctamente cuando se está en el modo portátil, especialmente en el eje X, que se descontrola demasiado. Cosa que pasa tanto en el apuntado como en el movimiento, pero que es especialmente molesto en el primer caso.
Ahondando más en lo que sería la percepción interna del combate, vemos que estamos ante enfrentamientos bastante fluidos gracias a la velocidad de movimiento y libertad que ofrecen los poderes sprint y salto, la variedad de armas y de poderes ofensivos con los que actuar, y amplitud en lo que se refiere a los escenarios de lucharemos. Lo único que rompe dicha fluidez es un problema que ya ocurría en el original y que en éste perdura, y es la cantidad de tiempo que tarda en apuntar después de haber utilizado un poder, sea cual sea.
Partiendo de lo dicho, nos encontramos con que la elección de en qué modo jugar se ve bastante condicionada. Hacerlo en fuera del dock, nos dará una mejor experiencia en lo que se refiere a la exploración y a la recolección de clúster, pero supondrá un hándicap considerable durante el combate por culpa de la cámara. Por su parte, en sobremesa el juego mejora considerablemente, se pulen errores de jugabilidad y se hace más cómodo el combate, lo cual provoca la siguiente afirmación: Es un juego con errores, pero que si lo juegas en sobremesa, desaparecen, lo cual es positivo, pero a la vez es negativo porque pierde su idea de portabilidad en Switch.
A pesar de todo, Saints Row IV: Re-Elected para Switch tiene un punto especialmente bueno que puede incluso llegar a paliar tantas dificultades y es que a pesar de todo, invita a jugar. Incluso mucho más que otros juegos actuales bastante más cuidados. Hasta en modo portátil, mantiene su esencia divertida con combates frenéticos, ideas surrealistas y una jugabilidad especialmente adictiva, lo que quiero decir, es que sea donde sea, su esencia de Saints, está intacta y nos permite disfrutarlo al máximo.
Conectando con el desplazamiento. Tenemos que, el juego funciona bastante bien por toda la ciudad escojamos un modo u otro. Lo peor durante nuestras carreras son los errores en el sistema de detección de colisiones, que hacen que aterrices a 10-20cm por encima del suelo o que choques contra la pared a dos metros, además de los problemas en el arranque de los coches. Si bien, éstos están nublados en el juego a causa de los poderes del protagonista, las pocas veces que lo usemos, nos encontraremos con una ruleta rusa que decidirá si el coche arranca en condiciones o lo hará a trompicones, lo que a la larga hace que avancemos por la carrera en picos de velocidad.
Es un deleite poder disfrutar así de la ciudad. |
En el combate, la cosa no mejora mucho. Es probablemente el aspecto con más controversia, ya que de por sí, como pasa con muchos ports, el apuntado en Switch no precisamente cómodo y Saints Row IV: Re-Elected no es la excepción que confirma la regla. Para más ende, el juego tiene inconvenientes al mover la cámara correctamente cuando se está en el modo portátil, especialmente en el eje X, que se descontrola demasiado. Cosa que pasa tanto en el apuntado como en el movimiento, pero que es especialmente molesto en el primer caso.
Ahondando más en lo que sería la percepción interna del combate, vemos que estamos ante enfrentamientos bastante fluidos gracias a la velocidad de movimiento y libertad que ofrecen los poderes sprint y salto, la variedad de armas y de poderes ofensivos con los que actuar, y amplitud en lo que se refiere a los escenarios de lucharemos. Lo único que rompe dicha fluidez es un problema que ya ocurría en el original y que en éste perdura, y es la cantidad de tiempo que tarda en apuntar después de haber utilizado un poder, sea cual sea.
Y vosotros, ¿cómo os desenvolvéis en combate? |
A pesar de todo, Saints Row IV: Re-Elected para Switch tiene un punto especialmente bueno que puede incluso llegar a paliar tantas dificultades y es que a pesar de todo, invita a jugar. Incluso mucho más que otros juegos actuales bastante más cuidados. Hasta en modo portátil, mantiene su esencia divertida con combates frenéticos, ideas surrealistas y una jugabilidad especialmente adictiva, lo que quiero decir, es que sea donde sea, su esencia de Saints, está intacta y nos permite disfrutarlo al máximo.
Steelport en nuestra mano
Viajamos a la ciudad de Steelport nuevamente. Esta vez pudiendo tomarla de la mano (literalmente hablando). Nos encontramos con un port que a nivel de escenarios, especialmente de color, se ve considerablemente bien. Remarcando concretamente los efectos de luces producidos por los neones de los poderes o por el iluminado de la ciudad. También es cierto, que se deba que el juego se ve más oscuro de lo normal, incluso más de lo que ya lo era en 2013.
En cuanto al modelado, han evitado el downgrade a nivel de sobremesa, lo cual es lógico al ser un juego de hace siete años, pero no lo han conseguido en la versión de mano. Cuando jugamos en sobremesa, se nota una suave mejora en los modelados y un mejor rendimiento en la generación de mundo. En contraposición con la segunda opción, que nos brindará un juego con muchos dientes de sierra y bastante popping. Una cosa que sí que me he dado cuenta, y que he comparado personalmente con el juego en Xbox 360 y gameplay varios, es que puede apreciarse una mejora en los gestos del/la Presidente de Estados Unidos durante las cinemáticas.
Sin duda, un juego en el que el presidente de Estados Unidos va en pelotas por una nave espacial esquivando enemigos, tiene que tener un apartado artístico curioso. |
El problema más destacable del juego y que no se salva en ninguno de los modos, es sin duda en los problemas del antialiasing. Si bien, ya he dicho que la sobremesa se libra en parte de los dientes de sierra, hay un problema añadido en las cinemáticas, ya que, a veces, se forma en torno al modelado de los personajes que están en movimiento, un pequeño contorno blanco que hace notoria la carencia de pulido a nivel gráfico en el juego, aparentando que solo importaba evitarlo durante la experiencia de juego, pero no durante las escenas.
Terminando con el apartado sonoro. Nos damos cuenta de que no ha cambiado en lo más mínimo, seguimos escuchando la misma música que entonces, la que tanto gustó y que tan bien encajaba con las situaciones rocambolescas de la vida de nuestros Saints. Puede aparentar ser una aspecto negativo, pero más lejos de la realidad, los temas que nos brindaron eran tan espectaculares, clásicos y/o raros, que dejarlos como estaban era lo mejor que se podía hacer con ellos.
Saints Row IV: Re-Elected está disponible en Nintendo Switch, PlayStation 4 y Xbox One.
Si te gusta el juego y estás pensando en comprarlo, te dejamos un enlace a Amazon donde poder hacerlo.
– La amalgama de colores se disfruta mejor en esta plataforma.
– Juega donde quieras.
– Mal antialiasing.
– No innova nada en referente al Saints Row IV original.
Terminando con el apartado sonoro. Nos damos cuenta de que no ha cambiado en lo más mínimo, seguimos escuchando la misma música que entonces, la que tanto gustó y que tan bien encajaba con las situaciones rocambolescas de la vida de nuestros Saints. Puede aparentar ser una aspecto negativo, pero más lejos de la realidad, los temas que nos brindaron eran tan espectaculares, clásicos y/o raros, que dejarlos como estaban era lo mejor que se podía hacer con ellos.
Conclusión
Saints Row IV: Re-Elected es un port bastante arriesgado, ya que arrastra problemas pasados y el factor principal de la consola, la portatilidad, no la aprovecha como debería. Obligándonos a jugar en modo sobremesa y demostrando que el juego está pensado para ella. Sin embargo, sigue teniendo ese toque atrayente típico de la saga que hace que a pesar de todo, luzca bastante bien. Es un juego que aconsejaría principalmente para los amantes de Saints Row y para aquellos que no lo hayan jugado y solo tengan la consola híbrida.Saints Row IV: Re-Elected está disponible en Nintendo Switch, PlayStation 4 y Xbox One.
Si te gusta el juego y estás pensando en comprarlo, te dejamos un enlace a Amazon donde poder hacerlo.
Lo mejor
– Su genial sentido de humor, ilógico, sexual y totalmente alocado.– La amalgama de colores se disfruta mejor en esta plataforma.
– Juega donde quieras.
Lo peor
– La cámara no está bien adaptada a las palancas de los Joy-Con.
– Es más oscuro. Debes poner la iluminación bastante alta para poder ver en condiciones.
– Errores en la detección de colisiones.– Mal antialiasing.
– No innova nada en referente al Saints Row IV original.