Si algo siempre me ha gustado son los juegos «retro» o «pixel art». El conde Lucanor, sin conocerlo de nada, lo vi un día a la venta en las estanterías de un centro comercial y me llamó la atención su título, ya que invocó mis memorias de la EGB (ahora la ESO) cuando, en clase de Lengua, estudiábamos la obra de «Don Juan Manuel». Curioso, comprobé la caja y pude ver como se trataba de un juego español, lo cual hizo que mi curiosidad aumentara aún más.
Antes de que dejéis de leer el análisis advertiros de que NO SE TRATA DE UN JUEGO EDUCATIVO, así que seguid leyendo xD.
El conde Lucanor
Recuerdo que la primera impresión que tuve al poner este juego fue, y cito a Solid Snake «¿pero que coño…?». Me gusta lo retro, pero este juego era demasiado retro (los gráficos son 100% Atari).
Sin embargo, como no tenía nada mejor que hacer y curioso por la trama, decidí seguir jugando… Y seguir jugando… Y seguir jugando… ¡Hasta que me lo acabé! ¡Y he de decir que me ha gustado mucho! (vamos, ¡que tuve que tragarme mis palabras! xD).
La historia nos meterá en el papel de Hans, un niño al que al principio cogeremos un poco de asco por como trata a su madre, ya que, al tratarse de su cumpleaños, le exigirá a ésta, aún sabiendo que son más pobres que una rata, juguetes y dulces. La madre le explica que apenas tienen para comer, lo que hará que Hans estalle en cólera y le diga que se marcha de casa a buscarse la vida y que no va a volver nunca más.
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| Momento manga/pantene pro v total. Las escenas claves del juego vendrán presentadas con animaciones pixel art bastante curradas. |
La madre, que es una santa, reacciona preocupada por la integridad física de su hijo, como una madre haría, por lo que le da casi todos los ahorros que tiene, un bastón que es muy especial para ella, ya que fue regalo de su padre, y algo de comida. Tras esto Hans se marcha para… ¿siempre?
Y digo «¿siempre?» porque la vida da muchas vueltas, y tras encontrarnos con varios personajes en apuros a los que podremos decidir ayudar o no (recomiendo hacerlo ya que luego te facilita mucho el juego, tal como he dicho antes «la vida da muchas vueltas»), ocurrirán unos eventos que harán que Hans quiera volver a casa.
En mitad de su periplo se encuentra con un extraño cuervo que hará que pierda el conocimiento y que despierte en noche cerrada, manifestando que «tiene frío» y que «mejor vuelvo a casa». (Ahora sí que vuelves a casa, ¿eh? ¿Hans?).
Para movernos en la oscuridad tendremos una vela, solo viendo lo que ella ilumina, lo cual es un pequeño círculo que rodea el incandescente objeto, y al portarla Hans, pues alumbra un círculo a su alrededor estando Hans en el centro.
Tras andar un poco veremos que la noche esconde varios peligros, como unos demonios/cabra que no cesarán en su empeño por devorarnos.
En la huída veremos un extraño duende flotante azul, a quien seguimos para que nos conduzca al interior de un castillo.
El duende se presentará como el sirviente del Conde Lucanor, quien busca niños de noble casta para nombrar a su sucesor y heredar su inmensa fortuna. Hans miente diciendo que proviene de una noble casta y que está interesado, por lo que empieza el juego del Conde. Hans tiene que averiguar el nombre del sirviente del Conde, y para ello, deberá resolver una serie de puzzles y misterios que hay en las diferentes habitaciones del castillo.
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| Los puzzles no es que sean difíciles. Hans además se encargará de darnos «sutiles» pistas. |
Cada habitación es un puzzle que nos dará una letra del nombre del duende, y luego tendremos que ordenarlas para dar cabida a un nombre; pero no es todo tan sencillo, ya que también hay letras falsas, repetidas (que cuentan como válidas) y un sinfín de peligros en el castillo, como «los funcionarios». Estos entes, aparte de ser indestructibles, absorberán el alma a Hans drenando su salud de mala manera, por lo que es conveniente evitarlos.
Hans no es que sea muy hábil, por lo que solo puede andar (ni correr sabe el pobre) y portar una vela (vamos, que no vemos que tenemos a dos metros delante, lo que adereza el sentimiento de Survival Horror del juego y que damos algún que otro «bote»), aderezado aún más por el hecho de que el juego NO TIENE CHECK POINTS, y que para grabar partida tendremos que gastar valiosísimas monedas de oro que escasean mucho.
EH… ¿HOLI..?
Sin embargo, pronto encontraremos varias velas que podremos dejar en el suelo para crear así un punto de luz y ver qué camina por esa zona.; Aquí entra el factor estratégico del juego, ya que es conveniente hacernos con muchas de estas velas e ir diseminándolas por el castillo para que no nos demos de morros con algún funcionario.
Cabe decir que las velas las podemos dejar y coger a voluntad un número ilimitado de veces, por lo que es conveniente que una vez conseguida una letra de una habitación, es mejor recoger la mayor cantidad posible ya que seguramente no volvamos a pasar por ahí.
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| ¡Malditos funcionarios, seres sin alma! |
Aparte de Hans, en el castillo encontraremos varios NPCs que nos ayudarán (o no) en nuestra aventura, además de registros que nos hablarán del pasado del castillo, del origen y de una misteriosa muchacha llamada Lucrezia.
¿Cual será el nombre del misterioso duende azulado? ¿Realmente el Conde Lucanor tiene un tesoro en el castillo? Y… ¿Quién es Lucrezia exactamente?».
El juego a mí me ha sorprendido bastante, no teniendo una duración de más de 3-4 horas (dependiendo de lo hábiles que seáis) y, además, hay varios finales, aunque casi todos dependen de los últimos 15 minutos del juego. Además, mencionar, que he vivido uno de los momentos más creepys en mucho tiempo pese a sus gráficos pixel art; una valiosa lección, de no juzgar un libro por su portada (o en este caso… ¡¡¡por sus pixelacos!!!!).
El apartado sonoro también me ha sorprendido, ya que pese a tener un sonido al nivel de los gráficos, está bien cuidado en el hecho de que aprovecha el estéreo bien. Yo he jugado en 5.1 y me ha permitido saber donde están los enemigos al oír por donde viene el sonido, algo que ni se me hubiera ocurrido que tendría un juego de este tipo.
Eso sí, teniendo en cuenta su duración y solo por esto, no recomendaría su compra en formato digital por más de 10€, pero que cuando lleguen las rebajas deberíais tenerlo en cuenta, repito, ¡¡¡SI OS VAN LOS JUEGOS RETRO NIVEL OMEGA!!!!!
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| ¡No siento las piernas! |
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2 comentarios
Algo que me fascina de este título que aún no he probado es que lo consideran como una mezcla de The Legend of Zelda con Silent Hill.
Pues un aire tiene, es muy sencillo, aviso, como digo en el reportaje, solo andas y coger/dejar velas. Tiene un punto malrollero, pero tanto miedo como SH no da. Es miedo light