Golpeando que es gerundio
Desde su temprana juventud, Jem Belcher se ha sentido atraído hacia los combates a puño descubierto que su abuelo -Russell Crowe- enfrenta. Esa motivación le hace asistir a ellos, pero su madre, conocedora de la evolución destructiva de su progenitor, quiere apartarlo de esa vida. Algo que, como imaginamos, no logró.
Jem alcanza su mejor época bajo el entrenamiento de Bill Warr |
Los años pasan y Belcher -Matt Hookins- trabaja en una forja, pero el dinero escasea. En una feria tiene la oportunidad de enfrentarse en combate con un hombre y consigue derrotarlo, ganando una buena recompensa y siendo descubierto por Bill Warr -Ray Winstone-, un entrenador que ve en él el material necesario para moldear a un ganador. Aquí es donde comienza su ascenso y su mudanza desde el pueblo a la gran ciudad. Allí conocerá el éxito, pero, como suele ocurrir, no siempre viene acompañado de mesura, control y salud.
Partiendo del cortometraje que el propio Matt había creado en 2017, se traza una historia que amplía y desarrolla la figura del combatiente de boxeo. Su vida, como el propio director dijo, está rodeada de ese aura de muñeco roto por la fama y las consecuencias que acompañaron su vida (por ejemplo, la pérdida de un ojo). Aderezada para servir al pulso dramático del cine, se amolda en el esquema que conocemos de caída y redención. De este modo, aunque los actores son diferentes, eres consciente de lo que ocurrirá y, como no acabes de empatizar con el personaje o temática, se te puede hacer un poco larga. Eso sí, por el camino no tardaremos en ver temas como la familia, el sacrificio, el propio capitalismo, etc.
Jem enfrentándose con guantes a su rival Henry en «La pelea olvidada del Siglo» |
No podemos olvidar que estamos ante una película de boxeo y, como no podría ser de otra manera, aquí han venido a pegarse. Las escenas de enfrentamientos están bien rodadas y transmiten bien el esfuerzo corporal de los combatientes. Si eres fan del deporte de cuadrilátero, disfrutarás sin duda.
A la esquina del cuadrilátero
Aun teniendo bastantes personajes apareciendo en pantalla, la acción se centra en unos pocos y en cómo van evolucionando a través de las circunstancias que se suceden.
Aquí destacamos al propio Jem Belcher, interpretado por Matt Hookins. Ese toque inocente, pero trágico lo lleva bien en su interpretación, aunque a veces pueda hacerse pesado. Aun así, se nota que conoce bien el deporte que está llevando a la gran pantalla, pues se entrega en las escenas de combate y las vuelve más creíbles, ofreciendo momentos dramáticos. Para lograr el éxito tendremos a su lado a Bill Warr, Ray Winstone, que será esa tradicional visión en la que la disciplina y la entrega son fundamentales para alcanzar el éxito y evitar el derrumbe.
El joven Jem aprende lo «atractivo» que es pegarse con la gente de su abuelo |
Y gran parte de culpa de esa caída la tiene Lord Rushmore, Marton Csokas, representando esa visión tan controladora y ególatra de la clase alta, donde solo eres interesante si tienes una utilidad. Por su parte, y por mencionarlo, resulta curiosa la escasa participación de Russell Crowe. Su personaje de Jack Slack está en pantalla el tiempo justo para hacerse notar, pero al mismo tiempo te cuestionas lo poco aprovechado que está el veterano actor.
La testosterona del conflicto
Pero para que haya un gran espectáculo tiene que existir un buen escenario que lo albergue. Como buena película basada en épocas pasadas, uno de los puntos más destacados de la producción es la recreación histórica y el vestuario seleccionado para el mismo. En este punto, se muestran dos ambientes muy diferenciados (pueblo/ciudad), cada uno representado de una manera que te permite ver el cambio en la vida de Jem. Al mismo tiempo, la ropa también cambia y se vuelve más elaborada (con sus consecuente pulla por parte de los pueblerinos). Momento importante que detalla en gran trabajo es cuando, en pleno éxito, comienzan a venderse unos muñecos de madera del boxeador a modo de merchandising, muy acordes con la época.
¡Qué bonitos se ven los decorados de la ciudad! ¿Quién no querría esta ahí? |
Además, si sumamos una banda sonora correcta que sirve para encumbrar los conflictos que vemos en las escenas, nos encontramos ante un resultado artístico muy bien resuelto.
Conclusión
La forja de un campeón, al igual que muchas del género, es una película que ya hemos visto muchas veces y que tiene que tratar de sorprender para ofrecer algo diferente. En este caso, la historia de esta figura del boxeo puede resultar interesante para muchos espectadores, que verán cómo se desarrolla el personaje pasando de lo más humilde al más alto éxito (y los problemas que aparecen al llegar allí). No evita presentar temáticas como el capitalismo o las diferencias sociales, pero acaban siendo algo pasajero. Eso sí, el casting actoral se muestra competente y resuelve bien sus personajes que, sumándose al buen trabajo de caracterización y recreación, ofrece un ambiente creíble.
El tráiler está en inglés. En cuanto esté disponible el castellano, lo actualizaremos.
La forja de un campeón llegará a los cines españoles el día 4 de noviembre de 2022. Si eres de los que disfruta de una historia de evolución y conflicto con un trasfondo deportivo, esta es tu película. Si te gusta el boxeo, siéntate para disfrutar un poco de sus orígenes.