Análisis de Super Mario RPG (Remake) en Nintendo Switch

Desde el reino champiñón os traemos el análisis de Super Mario RPG Remake para Nintendo Switch, joya de la corona que la alianza Nintendo-Square nos trajo allá por el 1996 en exclusiva para el cerebro de la bestia, Super Nintendo. Desafortunadamente, y como muchos otros títulos de la época, los jugadores europeos no tuvimos oportunidad de catarlo.

Los recuerdos a veces juegan malas pasadas, ya que, lo que igual recordamos como algo bonito y maravilloso, puede terminar siendo una terrible decepción tras años de macerar buenas sensaciones y nostalgia. ¿Ocurrirá lo mismo con este remake de Super Mario RPG? ¿Ha sido buena idea recuperarlo? O por el contrario, ¿habría sido mejor dejarlo en el cajón de los recuerdos?

En el año 1996, Nintendo y la antigua Square nos maravillaron con una alianza que dio lugar a uno de los RPGs más vistosos, bonitos y divertidos que se podía disfrutar en una Super Nintendo, Super Mario RPG. Con este sencillo nombre nació un juego que tenía la fuerza y el carisma de los personajes de la franquicia Super Mario mezclados con los controles por turnos de los entonces populares RPG que reinaban el sector, como lo fueron los diversos Final Fantasy o Chrono Trigger. Dicha mezcla estaba aderezada con un humor indescriptible y sin olvidar nunca el platataformeo, piedra angular de cualquier Super Mario que se precie. Desgraciadamente, Super Mario RPG fue una de esas joyas, como fueron los mencionados Final Fantasy V-VI o Chrono Trigger, que no llegaron a cruzar el charco y que se quedaron en tierras americanas y niponas por lo que, en su momento, solo pudimos disfrutarlo con tristeza viéndolo en las páginas de nuestras revistas favoritas.

La historia de Super Mario RPG no se centra en elaboradísimas tramas argumentales como fueron las de los triplemente ya mencionados Chrono Trigger o Final Fantasy VI. En esta ocasión, la princesa Peach acude a casa de Mario para pagarle una visita, y, mientras se encontraba recogiendo flores, es secuestrada por el malvado Bowser. El fontanero bigotudo más popular de todos los tiempos acude raudo a su rescate. Durante el enfrentamiento con Bowser, un nuevo enemigo sorprende en la contienda apoderándose del castillo del reptiliano rival de Mario y desperdigando a los 4 vientos a los tres protagonistar: Bowser, Mario y Peach. A partir de ahí, Mario iniciará un periplo para localizar a la princesa Peach donde hará nuevos amigos, se encontrará con otros viejos e incluso forjará alianzas con viejos enemigos…

Como podéis comprobar, ante nosotros tenemos una trama que ni hace 27 años era original, rozando con tópicos y premisas bastante usadas, especialmente en el mundo Super Mario. No obstante, Square, conocedora de todo esto, optó por dotar al juego de cierto toque cómico con conversaciones muy locas y momentos surrealistas que nos harán esbozar más de una vez alguna que otra sonrisa o carcajada. Decisión muy acertada desde mi punto de vista y que Nintendo ha seguido como un mantra en su saga “Mario & Luigi”, heredera espiritual de la alianza con Square.

Super Mario RPG nos ofrece todo lo que un juego de Square podría darnos en aquel momento, pero con ciertas mecánicas para hacerlo más dinámico y divertido y que, además, resultaron pioneras en su día. De este modo, nos encontramos con un juego de estrategia por turnos donde podremos elegir una de las siguiente acciones: Atacar, técnicas, defenderse o usar objetos. Como añadido jugable, el juego nos exigirá memorizar las animaciones de combate de los enemigos y de los aliados, ya que incluye una dinámica de juego que hace que si pulsamos el botón en el momento adecuado hagamos daño crítico o incluso de área. Lo mismo se aplica a los ataques enemigos, ya que podremos recibir menos daño e incluso hacer un bloqueo perfecto con 0 de daño si calculamos bien el timing. Personalmente, este tipo de dinámicas no las viví hasta Final Fantasy VIII y la famosa espada-pistola de Squall, por lo que podemos decir que se trataba de algo muy original y precursor para la época. Y para que veáis que no todo es fácil en combate, resaltar la existencia de ataques imparables por parte de algunos enemigos.

Pulsar el botón en el momento adecuado también se aplica a técnicas como magias, donde, por cierto, los puntos de Flor/MP son compartidos entre todos los personajes, debido a esto, debemos de ser muy cuidadosos a la hora de usarlas no sea que dejemos a nuestro sanador sin posibilidad de curar al equipo. Volviendo al tema de pulsar el botón en el momento adecuado, al hacerlo iremos rellenando un contador de combo que, al ir acumulándose, irá desbloqueando diversas mejoras, como hacer más daño o aumentar la defensa del equipo, eso sí, hay que tener en cuenta que si el combo se rompe perderemos dichas bonificaciones. Aparte, otro contador se irá rellenando y, al llegar al 100%, se podrá desatar una demoledora técnica triple cuyos efectos serán ofensivos o defensivos, dependiendo del trío de personajes protagonistas que tengamos activos.

En cuanto a la exploración, hay que decir que el juego rezuma “Mario” por los cuatro costados. El mundo se presentará en una curiosa perspectiva isométrica por donde podremos movernos, hablar con personajes, interactuar en determinados momentos y, lo más sorprendente para un RPG de la época, saltar; cosa nada extraña si nos paramos a pensarlo un segundo, ya que saltar es marca de la franquicia Super Mario y en super Mario RPG no iba a ser menos. De hecho, ya se encarga el juego de recordárnoslo constantemente con momentos y situaciones muy simpáticas como que un personaje nos diga “¡si de verdad eres Mario demuéstralo y salta!”. Gracias al salto se explota mucho la verticalidad en los niveles, donde no faltarán plataformas móviles o cofres voladores que se abren de un cabezazo como si es un bloque “?” se tratara.

Mario y sus amigos podrán equiparse con armas, armaduras y accesorios como en cualquier RPG que se trate. Como curiosidad, las armas cambiarán la jugabilidad del personaje y los timings a la hora de pulsar el botón. Por ejemplo, cuando Mario ataca con los puños o utiliza en su lugar su característica maza vista por primera vez en Donkey Kong.

Tras los combates obtendremos experiencia, y cada cierta cantidad acumulada, los personajes subirán de nivel, y con ello, sus estadísticas. Además, podremos hacer un boost «extra» en un campo de nuestra elección (Ataque/defensa física, puntos de vida  o Ataque/defensa mágica) o jugarnos nuestra experiencia ganada en un doble o nada cuando, esporádicamente, nos salga un mini juego de “¿dónde está Yoshi?”.

Si hemos sido jugadores del original de Super Nintendo, notaremos cómo se ha respetado al 100% los movimientos, timings, transiciones entre combate y mapa del mundo… Cosa buena, ya que el juego ya de por sí era muy ágil y dinámico. Además, mencionar que los combates no serán del todo obligatorios, los enemigos camparán a sus anchas por el mapeado y entraremos en combate si los tocamos. Esta es una práctica de la que no recomiendo abusar mucho porque terminaremos con personajes bastante débiles ante los jefes finales que sí que son obligatorios de vencer, aunque admito que el esquivar combates es práctico a la hora de explorar el mapa en búsqueda de tesoros ocultos.

Como añadidos y mejoras en este remake podemos indicar que se ha incluido la opción de autosave cuando haya transición entre zonas y la posibilidad de disfrutarlo en un modo relajado bastante menos exigente en los combates, modo que NO recomendamos jugar porque ya de por si se trata de un juego muy sencillo y accesible. Como nota os diremos que la dificultad se puede cambiar en cualquier momento de la aventura desde el menú de pause.

Antes hemos hablado de Mario y el plataformeo, pero no se nos puede olvidar la cantidad de mini juegos que tendremos que realizar en determinadas partes de la aventura y cuyo éxito precisará de nuestros reflejos y nuestra habilidad para el salto. Algunos ejemplos son la caída por las cascadas, recorrer un río corriendo encima de un barril mientras saltamos obstáculos, o conducir una vagoneta en el interior de la una mina mientras cogemos monedas. Mini juegos que aceleran el ritmo del juego y su dinamismo gracias a su frescura u originalidad.

Si algo da miedo a los nostálgicos es cómo le sentará a su juego favorito el paso del píxel 2D al poligonal 3D. En este caso os adelanto que podéis estar tranquilos, en el título original ya nos reíamos con las reacciones de los personajes y sus animaciones ante determinadas situaciones con llantos, alegría, sorpresa, humillación, etc. En el remake estas animaciones se han conservado y mejorado, e incluso se han introducido unas maravillosas secuencias CGI en los momentos clave del juego que dotan a la narrativa de mucha más fuerza. Los modelados, tanto de los NPCs como de los personajes, son bastante buenos y las animaciones de Mario y sus compañeros dentro y fuera del combate también, por poner un ejemplo, los bailes de nuestros compañeros cuando subimos un nivel son muy divertidos y fluidos.

Los escenarios han sido llevados muy bien y algunos como el del bosque se ha mejorado de forma bastante vistosa con diversos efectos de luz y sombra y detalles en la iluminación que da muy buen resultado. El rendimiento del juego es bueno, aunque sí que hemos notado algún que otro bajón puntual de frames mientras exploramos el mundo, pero meramente anecdótico y que no empaña la experiencia de juego para nada.

El apartado musical ha sido renovado, pero respetando en gran medida el original, es decir, tiene arreglos, sí, pero no se trata de nada orquestado o pomposo pudiendo reconocer el chip de la Super Nintendo ahí en el fondo. Además, los amantes de las BSO estarán de enhorabuena, ya que desde opciones podremos cambiar la banda sonora de “retocada” a “original”, y, de este modo, escucharla tal como sonaba hace más de 20 años.

Respecto a las partituras, reconoceremos melodías muy populares de Mario como son algunas de Super Mario Bros 3, Super Mario World o el incombustible tema principal de Super Mario Bros, aunque también abundarán nuevas bastante animadas que incitarán a la exploración y que nos acompañarán durante toda la aventura. El juego estará traducido al castellano con una muy buena geolocalización, tal como Nintendo nos tiene acostumbrados.

Super Mario RPG supuso un momento de reflexión en la franquicia y fue el precursor de lo que ahora conocemos como la franquicia de “Mario & Luigi”, juegos muy recomendables y cuyas últimas entregas fueron los respectivos remakes de sus dos primeras aventuras de DS para la 3DS. Si habéis jugado a estos últimos y jugáis a Super Mario RPG, notareis destellos y pequeños detalles de esta franquicia en él. Super Mario RPG se trata de una divertida aventura que disfrutar para todo amante de los juegos de rol de corte clásico, tratándose de un juego muy sencillo y accesible para todo el público que además nos hará disfrutar además de reír con muy buenos ratos de diversión.

En conclusión, una aventura que bien puede pecar de simple y corta; por lo que si buscáis grandes estrategias, estudio de fortalezas, debilidades y puntos débiles así como grandes desafíos (componentes básicos en un RPG), puede que se os quede un tanto corto, pero si por el contrario buscáis echar un buen rato con un juego con grandes dosis de diversión así de sorpresas jugables, este es vuestro juego, ya que son cosas que instan al jugador a continuar avanzando en la historia y descubrir el secreto que hay tras las 7 estrellas fugaces y el nuevo enemigo que ha invadido el mundo champiñón durante las 10-11 horas que dura la aventura..

Super Mario RPG Remake ya se encuentra disponible en exclusiva para Nintendo Switch tanto en formato físico como digital.