En una época donde parece que la IA es el tema de moda, nunca está de más recordar que uno de los grandes miedos de la humanidad en los 80-90 era acabar ser dominados por una. Uno de esos ejemplos en formato videojuego es System Shock cuyo remake os traemos en forma de análisis en PS5 después de ser estrenado el año pasado en PC.
System Shock y un remake que le hace justicia
Hacer un remake y más de un juego de culto como lo es System Shock no es una tarea especialmente sencilla. Es difícil traer a la actualidad un tipo de juego cuyas mecánicas no están adaptadas al gusto de los jugadores de ahora, y sobre todo es difícil atraer al gran público a un tipo de juegos donde el aspecto visual no es su mayor atractivo. Por eso había que contar con un estudio de desarrollo especializado en este tipo de aventuras como es Nightdive Studios, que ya ha conseguido recuperar un gran número de juegos clásicos para que puedan ser disfrutados por una nueva generación de jugadores.
Como ya os contamos el año pasado en nuestro análisis en PC de este título, el remake de System Shock vuelve a recrear la aventura original con:- Nuevos efectos visuales en alta definición y 4K a 60fps
- Controles bien adaptados a los mandos de las consolas de nueva generación
- Una interfaz de usuario remodelada para adaptarse a los nuevos tiempos
- Efectos de audio y banda sonora totalmente renovada
¿Y qué nos vamos a encontrar en este remake? Pues la terrorífica historia del ascenso al poder de una IA llamada SHODAN y que nos llevará a recorrer los misterios de una estación espacial llamada Citadel en la que reside el núcleo de la misma. Nuestro protagonista se despertará en la estación armado sólo con una tubería y tendrá que hacer frente a los misterios y al horror que ha desatado SHODAN en la estación. Para ello, se tendrá que enfrentar a diversas trampas, puzles y por supuesto una horda de mutantes que no quieren hacerse amigo precisamente de nuestro avatar protagonista.
Una de las novedades con respecto al original es la elección del género del protagonista, pudiendo jugar ahora la aventura con una mujer o con un hombre. No cambia el transcurso de la historia, pero está más acorde a los tiempos actuales para permitir una mejor identificación del personaje con el jugador.
Por otro lado, vamos a tener un selector de dificultad más que interesante para que todo el mundo se pueda acercar al juego independientemente de su habilidad. Una de las razones por las cuales muchos jugadores no se enfrentan a este tipo de juegos de la vieja escuela es precisamente su dificultad y de esta manera salvamos esa barrera que muchas veces hace que el juego no cale en el gran público. Para este remake se han incluido 4 selectores con 3 grados diferentes de dificultad. Así que ya no hay excusa aunque seas un «manco» para poder jugar System Shock en cualquier momento fijando tu dificultad a la carta.
Esta IA no es amable
Nuestra aventura en la estación se va a desarrollar en 9 niveles diferentes con un mapeado bastante extenso y lleno de secretos, trampas y varios puzles que nos van a traer de cabeza desde las 6 horas que puede llevar completar el juego hasta las 30 si quieres explorar en profundidad todos los mapeados. Ya os adelantamos que es muy interesante explorar todo lo que se pueda para facilitar nuestra aventura por Citadel, enfrentarse a hordas de mutantes con una barra de tubería no es precisamente la mejor idea y os aseguramos que hay armas de destrucción masiva diseminadas por todo el escenario.
Vais a visitar todas las instalaciones de Citadel desde plantas médicas a plantas de mantenimiento pasando por la cubierta de vuelo, seguridad y por supuesto el puente donde os tendréis que enfrentar finalmente a SHODAN en un enfrentamiento que a día hoy ya sabemos que no va a ser el último.
Como no podía ser de otra forma, System Shock remake sigue manteniendo toda la jugabilidad del original manteniendo la posibilidad de usar varias armas (aunque la munición no es muy abundante) y mejoras para el protagonista. Se ha mejorado mucho toda la gestión del inventario y sobre todo se ha adaptado a su uso con mando que era uno de los aspectos a mejorar como bien indicamos en nuestro análisis en PC. Para nuestro gusto todavía se podría pulir un poco más el interfaz sobre todo a la hora de hacer un cambio de arma que en muchas ocasiones, y con varios enemigos a nuestro alrededor, puede resultar más que problemático dada la necesidad de tomar decisiones rápidas.
A pesar de estos pequeños detalles podemos decir que todo funciona como la seda en este remake y la experiencia de usuario a los mandos es más que satisfactoria tanto para los que conocen el juego original como para lo que se acercan de nuevas a este título.
Por otro lado, el combate contra los mutantes y robots que nos vamos a encontrar por la estación es prácticamente idéntico al original con un planteamiento de shooter en primera persona que se ve alterado ligeramente por unas fases en las cuales te manejas en el ciberespacio con una especie de nave, pero con unos controles muy similares a tus fases de exploración por la estación. Hay que destacar la puntería de los enemigos que no van a tener piedad del jugador y vamos a tener que estar muy atentos a nuestra barra de salud para no caer bajo sus garras.
No es un combate especialmente exigente, pero sí que requiere que estemos atentos al entorno, ya que muchas veces tendremos a enemigos por varios flancos y ahí sí que podemos sufrir más de un susto que nos lleve a tener que repetir alguna sección de nuevo. Por suerte, el sistema de grabación del juego nos permite grabar en cualquier momento para evitar tener que repetir grandes secciones del juego que es algo muy de agradecer y suele ser frustrante si no está disponible.
Mención aparte merece el diseño de puzles que es precursor de la manera de ofrecer puzles en los juegos de aventuras actuales, que van desde las típicas cerraduras con combinación a la resolución puzles guiando un haz de luz desde el origen al destino o de subir la potencia hasta activar el mecanismo. Hay mucha variedad y algunos de ellos nos va a llevar bastante tiempo resolverlos (y posiblemente más de una consulta a cualquier guía que encontremos en Internet sobre el juego). Da gusto ver este tipo de desafíos lógicos en los juegos a los que no estamos tan acostumbrados hoy en día.
Lo retro está de moda
El trabajo que se ha realizado desde Nightdive Studios para intentar darle un apartado visual a la altura de las circunstancias es verdaderamente notable. Ya os contamos en nuestro análisis en PC que la diferencia con el original era más que notable, y por supuesto aquí se ha mantenido igual y además se ha trabajado para tener una resolución en 4K y unos 60 fps que le van de maravilla al título. La fluidez del movimiento es de agradecer en un juego donde los reflejos pueden ser la diferencia entre la vida y la muerte del protagonista.
Tampoco nos podemos olvidar del esfuerzo que se ha hecho para mejorar los controles y adaptarlos a su uso con el mando, algo que no se estaba presente en su versión en PC cuando lo analizamos hace un año y ahora se ha añadido como no podía ser de otra forma para su versión de consolas de nueva generación. Ahora es bastante fácil moverse por el inventario y gestionarlo así como interaccionar con el escenario. Lo que sí es mejorable es la selección rápida de armas y el apuntado con el mando, que a veces resulta algo complicado sobre todo cuando intentamos obtener objetos de un tamaño relativamente pequeño.
Para este remake también se ha trabajado en el rediseño de todos los efectos de sonido así como de la banda sonora para darle un tono más actual y más orquestado que le da mucho más empaque al conjunto. Las voces tienen un doblaje en inglés con subtítulos en perfecto castellano. Lo mismo ocurre con todos los menús del juego que están bien traducidos al castellano para que no haya ningún problema de entendimiento a la hora de jugar. En general, este remake ha sido muy respetuoso con el material original en todos los apartados y eso es algo que aplaudimos a Nightdive Studios.
Conclusión
Es difícil no dejarse llevar por la nostalgia, y más si has jugado al juego original, por lo que no somos demasiado imparciales cuando os decimos que este remake de System Shock es un juego que merece la pena jugar. Los añadidos son muy interesantes y permiten ajustar el nivel de dificultad a todo tipo de perfil de jugadores para que sea atractivo para las nuevas generaciones. Si no has jugado al original es un buen momento para acercarse a este juego y descubrir uno de los precursores de grandes juegos como Dead Space o Bioshock.
System Shock remake estará disponible en formato físico y digital desde el 21 de mayo para PlayStation 5, Xbox Series X|S y en formato digital para PlayStation 4 y Xbox One.
System Shock remake
Un remake lleno de nostalgia con mejoras visuales y de interfaz que gustará a las nuevas generaciones de jugadores
Lo mejor
- La adaptación de los controles a un mando
- Los selectores de dificultad
- La cantidad de puzles y secretos
- Un nuevo final
Lo peor
- El apuntado con el mando
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Historia
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Jugabilidad
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Apartado artístico
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Apartado sonoro