Tras desempolvar los antiguos textos sagrados que guardaban nuestros ancestros dentro de relicarios consagrados por la mano divina, acudimos a terreno sagrado en las dependencias de Sony Pictures España para recibir en bendición la primera vista a su nueva película: El Exorcista del Papa (2023). Basado en los textos escritos por el padre Gabriele Amorth, nos presenta una historia de posesiones donde el propio autor se persona en el cuerpo de Russell Crowe para llevar a cabo las acciones que tanto lo definieron a lo largo de su vida: los exorcismos.

El exorcista del Papa llega a los cines españoles el día 5 de abril de 2023, hoy mismo. ¿Hemos temblado en la butaca por la tensión que ofrece la película? ¿Necesitamos ir a confesar nuestros pecados al salir? ¡Veamos!

Con la Iglesia nos hemos topado

1987, España. Una madre con sus dos hijos heredan una vieja abadía tras la muerte de un familiar y deciden venirse para restaurarla y así conseguir algo de dinero con su venta. No es un viaje apetecible, pero el problema monetario que arrastran hace de la necesidad una obligación. Con un equipo de trabajadores al cargo, comienzan las remodelaciones sin saber que allí dentro hay encerrado algo que busca salir desde hace muchos años. Para enfrentarse a ello, el Vaticano enviará a su más poderoso exorcista, el Padre Amorth, que tendrá que hacer frente al mal y a sus propios pecados si quiere sobrevivir.

¡Por el poder del Santísimo! 

La historia no duda en arrancar con rapidez presentando a sus personajes y la problemática existente. Así, el enfrentamiento ocupará gran parte del metraje, aunque aportando un trasfondo narrativo interesante para dotar de más profundidad al conflicto entre la idea del mal y la realidad del mal. De este modo, la elección de la península como localización no será banal, pues acerca referencias como los de la propia Inquisición y su impacto en la Historia. Al final, aunque el desenlace puede ser el esperado, el camino recorrido ha abierto nuevas líneas que apuntan a posibles secuelas

Si estamos acostumbrados a ver películas de terror con tramas similares, sabremos que en esta va a haber elementos que estarán presentes a lo largo de la película: desde disputas verbales con el poseído hasta deformidades físicas favorecidas por el poder del diablo. Todo este halo terrorífico aporta tensión en muchas secuencias, aunque no llega a estallar ofreciendo verdadero pavor. En cambio, se combina bien con situaciones ligeras, aportando cierto equilibrio. Además, llegados al final, tendremos un enfrentamiento que tira de la épica y, diría, fantasía, aportando ese lado mágico a la concepción religiosa.

Mirad esa cara de amor y bondad. ¿No queréis acercaros a darle un abracito?

Con la etiqueta de «basado en» se nos presenta al propio Padre Gabriele Amorth, interpretado por un gran Russell Crowe, que llega a la península con el objetivo de comprender lo que está ocurriendo. Cargando con un estigma de su pasado, buscará la manera de salvar a la familia aunque él tenga que caer en el proceso. Con igual marca en su vida, le ayudará el sacerdote español Esquivel -Daniel Zovatto-, mientras que en Roma le espera el Papa, interpretado por un magnífico Franco Nero, que tendrá que aguantar las conspiraciones.

Por parte de la familia, nos gustaría destacar el papel de Peter DeSouza-Feighoney, el niño poseído Henry, que ofrece una actuación que genera mucha inquietud en el espectador. Junto a él Alex Esoe -Julia, su madre- y Lauren Marsden -Amy, su hermana- se vuelcan en sus papeles.

En el nombre del maquillaje, del CGI y del equipo de arte

La elección de la abadía responde al propio género: encontrar un lugar antiguo, un poco destartalado y con mucha oscuridad. Así, ayudado por su decoración, plantea una localización que ya de por sí ayuda a transmitir ese mal rollo que tanto gusta al terror. En contraste a ella, tenemos las escenas del propio Vaticano, mucho más recargadas y bellas. Aquí me gustaría llamar la atención sobre un detalle: al inicio localizan la historia es Castilla – España, aunque muestran un coche pasando junto al mar (imagino que será un error geográfico). 

Penumbra, descontrol… Tenemos todos los elementos para crear ese lugar inquietante.

Por su parte, la mezcla de efectos prácticos y digitales sientan bastante bien a las numerosas escenas que lo requieren, siendo más gustosos a la vista los primeros. Con los segundos, además, nos encontraremos con algunos que no acaban de encajar (la boca abierta de más) o incluso algo extraños y mal llevados.

En el apartado musical hay que destacar el ambiente que se logra a través del silencio total y el uso de apenas unos efectos sonoros, algo que viene siendo habitual en estos casos. En los momentos más épicos, Jed Kurzel añade con sus notas emoción a la escena.

Conclusión

Aunque el propio nombre nos lleve a pensar en ello, el terror no lo será todo en esta película. Partiendo de la premisa del exorcismo de un niño en España, se nos lanza al descubrimiento de un misterio que puede salvar el mundo que conocemos. En efecto, tendremos al demonio poseyendo cuerpos, tendremos encuentros con lo paranormal, tendremos ataques utilizando los pecados cometidos… pero el camino no se centrará tanto en la tensión como en el desarrollo de algunos personajes. El peso recaerá en el Padre Gabriele, definiéndole como personaje y adentrándonos en sus métodos y pesquisas. Los efectos están logrados y las actuaciones cumplen. Sin duda estamos ante un buen producto que, si saben llevarlo, podrían convertirlo en una franquicia interesante del género paranormal/religioso.

El exorcista del Papa llega a los cines españoles hoy, día 5 de abril de 2023. Si eres de los que disfrutan de una buena película en ambiente terrorífico y, además, quiere una historia interesante, esta es tu cinta.

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De tierras gallegas con un lacón bajo el brazo. La vida frente a la pantalla me entregó unas gafas con las que veo en 8K. Me gustan las cosas bien narradas, sean del formato que sean. Mis estanterías están a rebosar de juegos, libros, miniaturas...

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