Tras regresar de la finca con nuestros dedos manchados de tierra, pero con el corazón calentito sabiendo que este año también se comen patatas caseras, agarramos el último gran desarrollo español que Devilish Games quiere que tengamos entre nuestras manos: Minabo – a walk through life. A poco que estés metido dentro de las noticias de este medio, es fácil que en algún momento hayas oído hablar de este título. Su campaña de marketing ha logrado tocar la fibra más cómica y libertina de los jugadores, logrando multitud de sonrisas en sus rostros (sí, no lo negaremos, en el equipo también tenemos nuestras coñas). Tras meses aguantado las ganas, es ahora cuando hemos podido darnos un buen recital con Minabo y no hemos dudado ni un segundo en querer mostraros nuestras opiniones acerca de ello.

Minabo – a walk through life llegará hoy (28 de abril de 2023) a Nintendo Switch, consolas Playstation y Xbox, además de Steam para los jugadores de ordenador. ¿Ha cumplido las expectativas tras las ganas generadas antes de su lanzamiento? ¿Deseamos encontrarnos rodeados de nabos de todas las formas? ¿Seguiremos el verso de «Caminante, no hay camino, se hace camino al andar» de Antonio Machado? ¡Veámoslo!

Nota: intentaremos ser lo más profesionales posibles, alejándonos de la broma sencilla. Lo intentaremos.

En el país de los huertos, mi nabo es el rey

Estás… ¿A gusto? La tierra que te rodea hace ya tiempo que comenzó a dejar de ceder a tu crecimiento, por lo que comienzas a notar que llegó el momento de salir para encontrar hueco. Asomas la cabeza y alguien espera al otro lado, disfrutando de tu nacimiento. Todavía eres pequeño y no sabes qué hacer, solo que hay un camino y una dirección. Hablas con todos los nabos que te vas encontrando durante tus primeros años de vida y, temiendo el avance del tiempo, decides tomártelo con calma. Aquel día de primavera el suelo comenzó a temblar y no te dio tiempo para escapar. Las fauces de Topota se abren camino y acaban con tu vida. No habías llegado a los diez años.

Al acabar tu vida, te harán un resumen de tu aventura.
Además, tienes la opción de ver los hitos conseguidos.

Pero por milagro reapareces el día de tu nacimiento. Ahora quieres cambiar tu acercamiento. Decides centrarte en la familia y en socializar, pero sin temer el qué vendrá. Te haces adulto y de la tierra emergen tus nabitos bebés. Tú y tu pareja disfrutáis hasta que el tiempo lo consume. Ahora quedas tú paseando con tus hijos, viendo que el final se acerca. Hablas con tu hijo y… te rechaza. Era algo que no habías planteado y, con el corazón vegetal roto, caes de rodillas y mueres. Esta vez descubres que la familia no es siempre un buen lugar en el que refugiarse.

Esto es Minabo, una creación constante de historias inesperadas que se van desarrollando según tus acciones (o la respuesta a las mismas). En ningún momento habrá un diálogo claro (a excepción de los bocadillos indicadores), por lo que la imaginación de cada uno tendrá que rellenar esos huecos y buscarle el sentido para la vida de cada una de las partidas. Lo interesante es lo impredecible de cada una de ellas, pudiendo buscar las mismas acciones y salirte totalmente lo contrario.

Aunque nos adentraremos más en el siguiente punto, podemos ya comentar que la libertad para vivir tu historia dependerá del modo al que juguemos. Contamos con un modo libre (disponible al acabar cinco misiones), donde tendremos la posibilidad de desarrollar nuestra aventura marcándonos nosotros nuestros propios objetivo y disfrutando del camino (o queriendo recolectar gorros). Pero para los que necesiten más estímulo, contamos con un modo misiones en la que se nos marcarán unas metas que debemos alcanzar antes de convertirnos en abono (ya sea vivir un número de años, tener ciertos amigo o envenenar a algún compañero de vida). Además de ser una fuente de retos, nos permitirá ir conociendo poco a poco las mecánicas del juego, sirviendo en sus primeros compases como una suerte de tutorial bien implementado.

Has de tener suerte para conseguir los gorros, pero hay que tener cuidado si algo te persigue.

A pesar de ello, no vamos a negar lo evidente. El disfrute va muy ligado a la experiencia personal de cada uno de los jugadores. Los que vengan a vivir una aventura más intensa, es probable que no encuentren satisfacción durante las partidas. Cada vida variará entre los cero y los quince minutos, convirtiéndose en una repetición constante que puede acabar en tedio para algunos.

Hay que saber cómo usarlos para vivir más

Por eso digo que las misiones son un gran acierto. Durante los veinticinco retos propuestos iremos conociendo todo lo necesario para poder conseguir cumplir diferentes metas vitales (vida con hijos, vida con mascotas, etc.). Pueden parecer pocos, pero no os dejéis engañar. El hecho de tener que cumplir tres objetivos al mismo tiempo puede llevarte a repetir más de una vez por una simple decisión en mal momento, aumentando la complejidad con cada nuevo nivel. Aquí tengo que decir que he en dos ocasiones se me cerró el juego durante una misión y tuve que repetirla. No es algo dramático (por la duración de las mismas), pero puede fastidiarte una vida bien encaminada.

Las estadísticas de los nabos y los rábanos son diferentes, aunque la manera de aumentarlas es similar.

Así que creo que ahora es el momento de comenzar a resolver dudas. ¿Cómo se juega a Minabo? Todas las partidas comienzan igual, poniéndole nombre a tu criaturita con ganas de salir de la tierra. Junto a ella siempre hay un grupo de familiares entre los que pueden estar progenitores y/o hermanos. Ellos serán los primeros con los que podremos interactuar, descubriendo los tres métodos de hacerlo y las tres estadísticas que fijar tu edad límite. De este modo, podremos realizar una comunicación de contacto físico (más amorosa), una de intimidad (más amistosa) o de pertenencia (comunidad). Cada una de ellas lleva asociada una barra en cada personaje que bajando paulatinamente con cada paso dado o con cada interacción fallida. Para conseguir lo contrario, relaciones correctas entre dos nabos. Según su posición, podremos variar nuestra esperanza de vida, que comenzará al máximo e irá decayendo con cada drama sufrido durante esta. Es cierto que es algo que parece sencillo, pero puede llegar a superarte cuando la cantidad de «seguidores» que tengas en pantalla sea lo suficientemente grande y ya no sepas con quién hacer las cosas.

Eso sí, hay que decirlo, no solo eres tú quien lo tiene. Las mismas estadísticas (modificadas para las mascotas, aunque similares) están disponibles en los demás nabos que te encontrarás por la aventura. El tipo de relaciones que establezcas con ellos determinará lo cerca o lejos que querrán tenerte, su amistad, su amor y, al mismo tiempo, el tamaño de su vida. La muerte será una constante durante tus partidas y solo tú podrás escoger cuál será tu reacción ante ella. Cuando sea la Parca la que abrace tu cuerpo, recibiremos un resumen de nuestra vida en el que quedan grabados los momentos únicos (haciendo referencia a esos últimos recuerdos). Y a volver a empezar.

Hay objetos por el camino capaces de cambiar una partida, ya sean positivos o negativos
para tus acompañantes.

Esto sería la vida sencilla, pero no acaba aquí la cosa. Además de las inclemencias del tiempo (sí, aquel bebé nabito de 0 años que murió achicharrado por un rayo) y otras sorpresas, tendremos la visita en ocasiones de Topota: el topo gigante que nos perseguirá por la vida. De modo alegórico nos demostrará que no hay tiempo para quedarse quieto y que nuestro caminar ha de ser constante. No aparece siempre, pero cuando lo hace ofrece esa tensión constante que aporta mucho a la partida.

Además, como coleccionable útil, contaremos con los sombreros. A lo largo de cada paseo vital podremos encontrarnos con nabos con un gorro puesto. Si queremos hacernos con él, tendremos que retarles a un «piedra, papel o tijera». En caso de ser los vencedores, lo conseguiremos. Podremos repetir en más ocasiones, aunque me remito al topo del párrafo de arriba para admitir una de mis muertes más lamentables (la del completista). ¿Para qué sirven? Además de mostrar tu lado más fashion, recibirás una mejora que puede hacer de la vida un lugar más sencillo.

Todo esto acaba combinándose de manera orgánica, favoreciendo el desarrollo de esas historias de las que antes hablaba y aportando ese toque único a cada una de las vidas. Incluso, si quieres, puedes acabar roleando diferentes arquetipos de personajes a lo largo de tu historia.

Cariño, acaba de cocerse nuestro hijo

Si atendemos a los anteriores juegos del estudio, podemos ver un cargado estilo oscuro que contrasta totalmente con este. La elección de este toque más alegre y divertido sienta perfecto a este título en el que pueden llegar a tocar temas más sensibles como la muerte. Los diseños de los nabos y rábanos (las mascotas) son lo suficientemente carismáticos para que acabes encariñándote de alguno de ellos a lo largo de la aventura, sufriendo al verlos caer de rodillas.

No queremos chulear, pero hemos encontrado el amor dentro del juego
al caminar con nuestro enamorado. ¿Quién?

Los escenarios, a su vez, son diferentes entre sí, pero coloridos, manteniendo esa variación estacional en sus elementos con cada paso que realicemos (importante en el juego al combinarlo con los gorros). Hay momentos en los que dan ganas de quedarse un instante quieto para ver la estampa.

Si un nabo cae solo en medio del bosque. ¿Lo escucha alguien?

Adentrándonos en el apartado musical, resulta interesante como desde el mismo menú de la videoconsola (ha sido probado en la PlayStation 5) ya te acercan a ese estilo tan alegre que intentan transmitir. Con poco protagonismo a partir de ese momento, la música se plantea como acompañante de la aventura, aunque es un trabajo que hace a la perfección. Resulta curiosa, para resaltar, la melodía que suena al nacer nuestro personaje, sonándonos a muchos la versión que han hecho.

A mayores, tendremos los diferentes sonidos que hará nuestro protagonista al dirigirse a otros nabos, caracterizándose algunos con la relación que mantiene. Además, es importante recordar, para evitar problemas posteriores, que hay alertas que te informan de sucesos letales que ocurrirán en pantalla. Fijarse (o no) en ellos puede ser la razón por la que te libres de ver la pantalla de recuerdos de nuestro personaje (si ha logrado hacer alguno).

¡La prueba! No hacer caso de una señal hizo que un rayo cayera sobre el bebé Minabo

Y cae de cajón, pero el título está disponible en varios idiomas, entre los que se encuentra del propio país el castellano y el catalán (que afectará solo a textos en pantalla).

Conclusión: no solo es marketing lo que hace divertido a Minabo

Minabo ha estado en boca de todos desde el mismo momento de anunciarse. La diversión que generaba el saber de un videojuego con ese nombre opacó un poco la necesidad de conocer su tipo y estilo, llegando a hablar con personas que no sabían de qué iba. Pero el momento llegó y ahora todos lo tendrán en sus manos y querrán disfrutar con él.

Con un estilo artístico particular y acertado, el juego nos lanza a tomar el control de las continuas reiteraciones de vidas de nabos. Con un toque sencillo de inicio, el juego apuesta por la creación individual de las historias, pero ofreciendo unas mecánicas que permitirán conseguir diferentes situaciones que lograrán llevarnos desde el total estrés al huir de un letal perseguidor hasta reconocer que hemos vivido una vida plena rodeada de seres queridos, nuestro rábanos-michi y nuestro rábano-doggy. A pesar de los fresco de la propuesta, es posible que no todos acaben comulgando con ella, encontrando en la repetición de las vidas un pesado tedio. Para ello, contamos con unas misiones que te permiten conocer los distintos elementos y plantear retos divertidos, sirviendo de base para que luego puedas crear los tuyos propios en el modo de vida libre.

Sin dudarlo, nos encontramos con un juego experimental que ha buscado plasmar de una manera muy particular la importancia de las relaciones humanas, ofreciendo esa doble lectura y reflexión: ¿son nuestras acciones las que determinan quién nos acompaña al final de la vida? ¿Querríamos pudrirnos junto a alguien o solos?

Minabo – a walk through life llega hoy, 28 de abril de 2023, a las consolas PlayStation y Xbox, además de a la Nintendo Switch y Steam (PC). Si eres de los que quiere ver a dónde conducen las consecuencias de una vida, este es tu juego. Si quieres pasártelo bien, aquí también puedes empezar.

Lo mejor

– El acompañar y vivir las diferentes situaciones con tu nabo
– El modo de misiones: divertido y con dificultad creciente
– La libertar dada para vivir las aventuras a nuestro modo (aunque subyugados a las mecánicas)
– Los diferentes modificadores que aparecen a lo largo de la aventura y te hacen tomar decisiones
– El apartado artístico tan fresco y animado

Lo peor

– La reiteración de vidas puede llegar a convertirse en tedio


Share.

De tierras gallegas con un lacón bajo el brazo. La vida frente a la pantalla me entregó unas gafas con las que veo en 8K. Me gustan las cosas bien narradas, sean del formato que sean. Mis estanterías están a rebosar de juegos, libros, miniaturas...

Leave A Reply

Exit mobile version