Un año más llega The Game Awards, una gala que este año estará marcada
por el apasionante duelo por el reconocimiento a mejor juego del año entre God
of War Ragnarok y Elden Ring, y como no, las sorpresas a las que nos tiene
acostumbrados. Desde la redacción de Chicas Gamers nos
queremos mojar una vez más en decir quién queremos (o desea) que sea el juego
o personalidad ganadora de cada nominación.
¿Quién acertará más de la quiniela? Te invitamos a que veas nuestras apuestas
y que nos digas las tuyas en comentarios.
La quiniela de Chicas Gamers en The Game Awards
Álvaro
Pese a que 2022 no ha sido un año en el que se haya asentado totalmente la
nueva generación, a última hora llega para agregarse a la lista de los
nominados
God of War Ragnarok, que amenaza como un titán con hacerse con gran parte de los galardones.
Pese a la presencia de este dios nórdico, hay títulos que intentan hacerse con
algún hueco en alguna candidatura como A plague Tale: Requiem, el
cándido
Tunic
o nuestra querida y esperada
Bayonetta 3, que creo serían candidaturas más que merecidas.
Lo si que tengo claro es que, pese a que mucha gente tiene muchas ganas del
Resident Evil 4 Remake, el juego más esperado es, y será siempre, el
incombustible The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom, al igual que
en juegos como servicio lo será Final Fantasy XIV. Estas cosas se me
dan fatal y como pitoniso no tengo buen futuro jejeje, pero a ver qué tal se
me da este año.
Antonio
Cuando hablamos del 2022 hablamos de la promesa de uno de los mejores años de todos los tiempos y aunque los retrasos se han llevado alguna de las grandes obras al siguiente, no podemos negar que la calidad y el gusto en las publicaciones.
La gran sombra para batir en los primeros meses ha sido, sin duda, el Elden Ring, la consagración de From Software y el paso necesario de su fórmula al mundo abierto. Poquito antes ya había llegado Horizon Forbbiden West, destacado también y con un nivel gráfico espectacular, pero que se ha visto opacado en muchas listas por la gran publicación de Sony: God of War Ragnarök, demostrando que Santa Mónica ha logrado darle la vuelta al personaje original de la saga con una entrega que eleva la narración y las temáticas a otro nivel (siendo el posible Goty del año).
Nintendo, por su parte, nos trajo dos juegos de Pokemon (Arceus y Españita) que han logrado que muchos fans alcen la voz por sus fallos gráficos y técnicos. Además, tras tantos años, el Kirby y la tierra olvidada mantiene el gusto de los originales y se muestra como un reto para conseguir su 100%.
Pero no puedo olvidarme de juego más pequeños, aunque no por ellos menos interesantes. El Tunic y el Cult of the Lamb fueron grandes descubrimientos que han entrado en mi top de diversión, aunque el primero ha logrado tocar la fibra sensible y nostálgica. Stray muestra un gatito bastante realista que logró hacer maullar a mis michis con sus sonidos, justo contrario al caso de Endling y su destructiva narrativa emocional. Inscryption, por su parte, mantuvo la tensión con su oscura e intrigante historia. Obsidian regresó por partida doble con el parche 1.0 de Grounded (para jugar en multi) y el Pentiment, juego con un gusto por el detalle fantástico. Y acabaré con el gran Immortality, una propuesta genial que perfecciona su estilo (aunque no para todos los públicos).
Y habrá mucho más, pero no hay tiempo para todo. Sin duda, grandes juegos como A Plague Tale: Requiem o Mario + Rabbits se me han quedado en el tintero y es probable que tengan fuerte competencia con los nuevos lanzamientos para 2023. The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom, Resident Evil IV Remake, Silent Hill, Fire Emblem, Ark 2, Starfield… ¡Qué maravilla!
La gran sombra para batir en los primeros meses ha sido, sin duda, el Elden Ring, la consagración de From Software y el paso necesario de su fórmula al mundo abierto. Poquito antes ya había llegado Horizon Forbbiden West, destacado también y con un nivel gráfico espectacular, pero que se ha visto opacado en muchas listas por la gran publicación de Sony: God of War Ragnarök, demostrando que Santa Mónica ha logrado darle la vuelta al personaje original de la saga con una entrega que eleva la narración y las temáticas a otro nivel (siendo el posible Goty del año).
Nintendo, por su parte, nos trajo dos juegos de Pokemon (Arceus y Españita) que han logrado que muchos fans alcen la voz por sus fallos gráficos y técnicos. Además, tras tantos años, el Kirby y la tierra olvidada mantiene el gusto de los originales y se muestra como un reto para conseguir su 100%.
Pero no puedo olvidarme de juego más pequeños, aunque no por ellos menos interesantes. El Tunic y el Cult of the Lamb fueron grandes descubrimientos que han entrado en mi top de diversión, aunque el primero ha logrado tocar la fibra sensible y nostálgica. Stray muestra un gatito bastante realista que logró hacer maullar a mis michis con sus sonidos, justo contrario al caso de Endling y su destructiva narrativa emocional. Inscryption, por su parte, mantuvo la tensión con su oscura e intrigante historia. Obsidian regresó por partida doble con el parche 1.0 de Grounded (para jugar en multi) y el Pentiment, juego con un gusto por el detalle fantástico. Y acabaré con el gran Immortality, una propuesta genial que perfecciona su estilo (aunque no para todos los públicos).
Y habrá mucho más, pero no hay tiempo para todo. Sin duda, grandes juegos como A Plague Tale: Requiem o Mario + Rabbits se me han quedado en el tintero y es probable que tengan fuerte competencia con los nuevos lanzamientos para 2023. The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom, Resident Evil IV Remake, Silent Hill, Fire Emblem, Ark 2, Starfield… ¡Qué maravilla!
Estela
Para mí el año 2022 ha sido muy malo en general, pero en el mundo de los
videojuegos tampoco es que haya brillado en exceso salvo esta última parte y
porque ha llegado un juegazo con todas las letras llamado
God of War Ragnarok, al igual que otros como
A Plague Tale Requiem
o
Bayonetta 3. El año empezó prometiendo con
Horizon Forbbiden West
y
Elden Ring, pero en mi caso nada más lejos de la realidad. El primero porque nunca he
sido fan de
Aloy, la jugabilidad del primer juego me resultó aburrida y todavía no he
empezado su continuación, y el segundo porque me pareció un tremendo copy
paste de otros juegos de la saga Souls y de él mismo, pero en un mundo
abierto, no entiendo quién lo defiende porque es que además llegó lleno de
bugs, pero bueno, ya se sabe que hay
comunidades tóxicas.
Por la parte indie, voy a destacar a mi querido
Cuphead
con su expansión
The Delicious Last Course, que volvió a suponer un reto y una alegría por partes iguales.
Además, Teenage Mutant Ninja Turtles: Shredder’s Revenge
o
Stray
(al que aún le tengo que echar las garras) han sido otros de los juegos
destacados en este apartado.
En cuanto a las decepciones, ha habido varias como
Babylon’s Fall, un juego que se lanzó en enero y ya ha cerrado sus servidores,
Gotham Knights, título que quiso parecerse a la saga Arkham y no le ha llegado ni a la
suela del zapato o quizá uno de los más sonados,
Pokémon Escarlata y Púrpura, que ha venido cargado de bugs, pero que por misterios de la vida se
justifican cuando hay a otros como
Cyberpunk 2077
se les crucifican.
En cuanto al futuro, parece esperanzador con anuncios tan esperados por los
fans como un remake de Silent Hill 2, el nuevo
Final Fantasy XVI, Forspoken o The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom, por citar algunos de los que llegarán próximamente.
Juanma
El 2022 ha sido en general un año bastante bueno para el mundo de los
videojuegos con un desembarco muy importante por parte de
Sony en el mundo del PC. Títulos como God Of War,
Spiderman
o
Uncharted
han llegado por fin a todos los jugadores que no poseen una consola o que
querían probar su flamante Steam Deck, que ha sido otro de los
dispositivos que ha empezado a despuntar en esta segunda mitad de año. En el
mundo de las consolas podemos destacar sobre todo la llegada de juegos tan
esperados como
Elden Ring
(ese mundo abierto al estilo Dark Souls que los fan pedían),
God Of War: Ragnarok
(Kratos reinando de nuevo) o
Bayonetta 3
(la bruja de Umbra ha llegado no exenta de polémica). Aunque quizás dónde más
brillo hemos encontrado es en el mundillo indie con títulos como
Tunic,
Trek To Yomi, Stray o la vuelta por la puerta grande de Guybrush Threepwood y su
Return to Monkey Island. Y por supuesto una mención especial al parche de nueva generación de
Cyberpunk 2077 que ha conseguido resucitar un juego qué hasta ahora era
considerado como maldito. A veces las segundas oportunidades existen (¿verdad
No Man’s Sky?).
Pero no todo han sido luces en este 2022, ya que hemos vivido grandes decepciones como han podido ser Gotham Knights, que se ha quedado muy por debajo de las expectativas de la saga Arkham o bien de Babylon’s Fall con Square Enix y Platinum Games fallando estrepitosamente en un pastiche poco propio del prestigio de ambas compañías. Estos son sólo dos de los fracasos más sonados, pero también hay que decir que no ha sido un año especialmente malo para el mundo del videojuego a pesar de la crisis a todos los niveles que estamos viviendo desde que empezó el año.
Para el próximo año espero encontrarme con bastantes sorpresas agradables, ya que hay bastantes títulos importantes en camino como Forsaken, Hogwart’s Legacy, la vuelta de Link a Legend Of Zelda, un nuevo Assassin’s… El futuro se ve bastante prometedor y esperemos que todos estos títulos le sigan dando brillo a este mundillo que tanto nos gusta y apasiona.
Pero no todo han sido luces en este 2022, ya que hemos vivido grandes decepciones como han podido ser Gotham Knights, que se ha quedado muy por debajo de las expectativas de la saga Arkham o bien de Babylon’s Fall con Square Enix y Platinum Games fallando estrepitosamente en un pastiche poco propio del prestigio de ambas compañías. Estos son sólo dos de los fracasos más sonados, pero también hay que decir que no ha sido un año especialmente malo para el mundo del videojuego a pesar de la crisis a todos los niveles que estamos viviendo desde que empezó el año.
Para el próximo año espero encontrarme con bastantes sorpresas agradables, ya que hay bastantes títulos importantes en camino como Forsaken, Hogwart’s Legacy, la vuelta de Link a Legend Of Zelda, un nuevo Assassin’s… El futuro se ve bastante prometedor y esperemos que todos estos títulos le sigan dando brillo a este mundillo que tanto nos gusta y apasiona.
Reo
Para mí 2022 ha sido un año muy raro, para que mentirnos, y eso no excluye al
mundo del videojuego. Iniciábamos 2022 con muchas grandes promesas que han
llegado, ya sea
Elden Ring,
God of War: Ragnarok
o
Pokémon: Escarlata&Púrpura
y a medida que trascurría, íbamos viéndolos aparecer, mientras otros grandes
títulos hacían acto de presencia, además de que unos cuantos se volvían
multiplataforma como
Miles Morales o
Sackboy.
No ha sido mi año favorito, pero hay mucha calidad y buen trabajo en los
juegos traídos. Sin embargo, veo una gran contra en este año y ese ha sido el
fandom, el cual, se ha vuelto mucha más radical, dando lugar a momentos de
discusiones e intolerancia en cuanto a las opiniones negativas hacia muchos
juegos, dejando de lado la idea de los videojuegos y volcándose aún más en una
guerra sin sentido sobre quien lleva razón.
Sonia
Este ha sido un año en el que a penas he cogido el mando y el teclado para
jugar, así que mi opinión sobre alguno de los temas a tratar en este
The Game Awards 2022 se me queda bastante grande. Aun así me he
podido terminar algunos juegos como God of War (2018) que lo he gozado
mucho, lo que me ha dejado con unas ganazas tremendas de
God of War Ragnarok
y más después de ver que está generando tanto revuelo. Confío y espero que
sea el GOTY porque su primera parte me ha parecido espectacular y sé que
esta segunda parte es aún mejor.
He podido jugar a las
Tortugas Ninja
y
Little Hope
en cooperativo, volver a jugar algo de forma cooperativa y sana ha sido un
gustazo para mí. He empezado tantos otros, como mi querido
Crash Bandicoot,
Ghost of Tsushima, Uncharted o Vampire The Masquerade-Swansong, otro al que le
tenía muchas ganas y la jugabilidad y la lentitud se me hizo algo tediosa.
Otro muy esperado para mí fue Overwatch 2, en el que tenía muchas
esperanzas puestas y no me ha llegado como lo hizo su primera parte, (y no,
no es el mismo juego 2 xD).
No puedo deciros lo mucho que me ha gustado Stray, porque por
desgracia aún no lo he podido empezar, pero seguramente os hablaría
maravillas de él y me alegraría que ganara algún premio, aunque no vaya a
ser el Goty porque ese Goty ya tiene nombre y apellidos.
Aún así me han gustado todos y cada uno de los juegos que he jugado, pero
también hay que destacar que los que se vienen me tienen en vilo, como
Silent Hill 2 Remake (precisamente porque este verano me pasé el
original en PS2) o Resident Evil 4 Remake, que me negaba a jugarlo
por su pésimo doblaje en castellano, así que ahora ya no tengo excusa.
Eso sí, ninguno supera la ilusión que me hace que salga
Crisis Core – Final Fantasy VII Reunion, volver a disfrutar de esta
aventura junto a Zack, Sephiroth y Génesis a un nivel gráfico tan cuidado y
con las mejoras que se vienen me hace especial ilusión. Se viene mezcla de
emociones a 4K, señores.