Análisis Injection PI23 Expansion Events en PS5

Tras bajar las persianas y haber cogido el mando con cierta tensión durantes varias horas, llega el análisis del Event Expansion de Injection Pi23 «No name, no number» en Playstation 5. Aunque publicados anteriormente con un acceso limitado, estos dos capítulos adicionales se suman ahora al juego base en una edición completa que verá la luz el 23/04/2022, dando así un punto inicial para que los nuevos jugadores hagan boca hasta el estreno de su segunda parte: «Ars Regia» (23/05/2022).

Tras adentrarme en las entrañas de este survival horror, he logrado recuperar el aliento y, por fin,  pasar a explicaros qué tal han salido estos episodios. ¿Han conseguido sorprender? ¿Han logrado llevarme hasta la locura? 

En este Event Expansion nos enfrentamos a dos aventuras que se desarrollan en dos localizaciones cerradas en las que, al estilo escape room, tendremos que ir resolviendo puzles para lograr avanzar a lo largo de los distintos lugares para lograr escapar de allí. Para hacer frente a esos retos, retomamos el papel del protagonista de los primera tanda de capítulos y nos adentramos en estos dos especiales temáticos.

«Feliz Vanidad» es el nombre que encabeza el capítulo orientado en la temática navideña. En él nos dejan en el parking de un centro comercial decorado para esta etapa llena de compras y tendremos que movernos por él hasta conseguir llegar a sus lugares más secretos. Por su parte, «Trick or treat» es el título del episodio aparecido durante Halloween y que nos adentra en el interior de una aparente mansión embrujada que tendremos que investigar.

Algunas notas servirán para dar contexto al escenario y añadirlo dentro de la trama general del juego

Pero la gran pregunta es… ¿De qué va realmente esta historia? Como ya han dicho desde el estudio, el total de la narrativa está dividida en tres entregas y se irá presentado de una manera muy críptica (a base de cinemáticas y notas), ofreciendo muchos huecos que los jugadores podrán ir rellenando con sus propias teorías. El mayor interés es, sin lugar a duda, el ir recogiendo esos pequeños documentos (algunos con errores) para darle forma en tu cabeza. Aun así, no puedo dejar de pensar que la verdadera experiencia es jugarlo tras haber completado la aventura de «No name, no number».

¿Recuerdas cuándo en el pasado jugabas a juegos donde había puntos de guardado y dónde podías perder la partida entera si no los habías aprovechado? ¡Qué momentos tan agradables! ¡Déjame hablarte de este juego!

Espera… Feliz… ¿qué? Si aquí solo hay muerte y destrucción.

Como ya enuncié, Injection Pi23 se engloba dentro de los survival horror con referencias tan marcadas como Silent Hill 2 o los Resident originales, entre otros grandes nombres. Con esto ya puedes hacerte una idea, un personaje en una situación donde el terror lo rodea y donde todos los elementos con los que puedes ayudarle a sobrevivir son lo suficientemente escasos como para plantearte en cada momento el usarlos o no. Y tengo que decir que, en esta parte, los dos capítulos cumplen: en el episodio de Navidad consigues pronto la pistola, pero la cantidad de enemigos hace que reserves los disparos a lo estrictamente necesario; por su contra, en el de Halloween, tardarás en hacerte con el arma, por lo que el sigilo se convertirá en tu mayor baza durante los primeros minutos de partida. Ambos acercamientos te llevan a tener tensión porque, como ya he dicho antes, cualquier descuido que tengas puede llevarte a la muerte y, con ello, a reiniciar el nivel desde cero. Y no querrás hacerlo tras realizar múltiples pasos de los puzzles.

Para ponérnoslo difícil tendremos en frente un buen número de enemigos repartidos por el escenario, aunque con diseños poco inspirados y bastante repetidos (la mayoría del juego original). Amenazantes en un inicio, pronto iremos descubriendo el número de disparos que aguantan o los puntos débiles de cada uno (o a reconocerlos por el sonido). Aun así, tengo que reconocer que la confianza puede volverse un verdadero problema si no atiendes lo suficiente, pero la mayoría de los casos los acabarás completando sin problema una vez pillado el truco. Eso sí, resulta interesante cómo el ser descubierto por un enemigo (y esto pueden hacerlo desde un piso diferente al que estás) hace que tu barra de resistencia baje más rápido que corriendo por el escenario, llegando a dotar de cierta estrategia estos movimientos en contadas ocasiones. Entre los diseños destacaré, eso sí, el del enemigo final del escenario de Halloween: inesperada referencia castiza con un puzle propio para derrotarlo.

No, no es el anuncio de los nuevos Pokemon

Pero los enemigos no serán los únicos que pondrán patas arriba tus opciones de supervivencia. Los escenarios tendrán partes iluminadas, pero también contarán con lugares donde la oscuridad envolverá al personaje y te impedirá observar correctamente el alrededor. Para estas ocasiones contaremos con una linterna que irá perdiendo batería con su uso, aunque se recargará mientras está apagada (o usando unas pilas). Pero también hay que reconocerle la importancia al sistema de cámaras que ofrece el juego. Con la cruceta del mando podrás alternar entre cuatro versiones: primera persona, tercera persona con cámara libre, tercera persona con auto guía o las clásicas cámaras fijas. El poder alternar entre ellas te puede permitir darte cuenta de distintos puntos de interés sobre los que habías pasado, aunque me veo en la obligación de llamar la atención sobre distintos puntos que he visto problemáticos con este sistema y, principalmente, con la cámara en primera persona. Al usarla he podido comprobar como hay objetos con los que no puedes llegar a interactuar (las mencionadas pilas), como el desplazamiento se vuelve más lento al ir agachado, la imposibilidad de apuntar correctamente con la pistola o momentos en los que he tenido que reiniciar partida pensando que se había bugeado el juego (a la entrada del cine donde no se movían los tornos). Estos problemas, obviamente, no ocurren con las otras cámaras propuestas. 

Pero no podemos obviar que una de las partes más interesantes de este juego es la resolución de los distintos acertijos que irás descubriendo a lo largo de los escenarios. La mayoría de ellos acabarás encontrándolos y resolviéndolos de manera orgánica mientras exploras el mapa, pero para otros tendrás que ir observando o recogiendo pistas que irás consiguiendo al superar algún desafío anterior. Al final, toda la partida acaba convirtiéndose en una cadena de acciones que tienes que ir engranando para llegar a ese lugar final donde finaliza el capítulo. Los distintos objetos que irás consiguiendo podrás usarlos en base, interactuar con ellos o combinarlos con otros para obtener una pieza clave.

¿En qué otro juego había llaves con símbolos?

Aunque la mayoría de ellos requiere de darle bastantes vueltas a la cabeza, al poco rato de iniciar comprobaras ciertos patrones y empezarás a adelantar los objetos que tendrás que ir consiguiendo para cada puzle, haciendo que los viajes de ida y vuelta sean más cortos entre los distintos puntos. Y esto se lo tengo que conceder. En el escenario de Navidad, por ejemplo, ir resolviendo acertijos (y apuntando las soluciones) te permite, llegado al punto de morir en momento avanzado, ganar tiempo al no tener que pasar por todos los puntos de la partida. 

Eso sí, al igual que con la cámara, no puedo evitar el pensar en ciertos momentos en los que un puzle logró sacarme un poco del juego. Lo ejemplificaré con el punto que más llamó mi atención: en el escenario de la Navidad hay un momento en el que tienes que subir a otro nivel del parking y no puedes hacerlo porque hay una valla que impide el paso. Tienes que conseguir un ticket para abrir esa zona, pero… ¿No sería más fácil saltarlo?

¡Hay que ser legal y no saltarse las normas!

Como ya había pasado con el juego base, los distintos mapas están basados en localizaciones reales existentes en Málaga. 

«Feliz Vanidad» se desarrolla en el Centro Comercial del Rosal, inspirado parcialmente en el Centro Comercial Rosaleda, afincado en Málaga. Hay cierto interés en recorrer las tiendas (no todas abiertas) y observar los juegos de palabras realizados con las distintas marcas (aunque pronto te darás cuenta que hay muchas repetidas). El diseño de este nivel es más abierto y permite moverte con mayor libertad, pero no impidiendo que tengas que ir de una esquina a otra del mapa resolviendo puzles.

Venga, ¿a qué hace referencia este cartel?

Con el especial de Halloween pasa exactamente lo contrario, los pasillos son más estrechos y los encuentros con criaturas tiene que medirse muy bien para evitar salir herido y acabar muerto en el pasillo. De nuevo tenemos una ubicación real que sirve de base para el diseño de la zona, «el Cortijo Jurado», lugar que se dice encantado. Resulta curioso cómo se ha logrado que su historia propia tenga referencias dentro de los puzles, además de guardar otras referencias a la historia de España.

Ha llegado el momento de hablar de un detalle que, lejos de ser un problema, resulta en uno de los puntos más flojos de la experiencia: los gráficos. Aunque, como he ido diciendo en los puntos anteriores, el terror y la tensión que consigue el juego con sus mecánicas es el propio de los viejos survival horror, es importante avisar de que los gráficos también parecen un poco desfasados y las animaciones bastante básicas (aun habiendo escenarios que resuelven bien). La mayoría de enemigos tienen unas texturas extrañas y hay escenarios que recuerdan a los de generaciones pasadas. Pero, aunque hay detalles que pueden cortar la inmersión en el juego como enemigos atravesando paredes o movimientos poco fluidos, esta situación puede llegar a entenderse teniendo en cuenta el tamaño del estudio y su único programador.

Pero hay que recordar una cosa, el terror no solo entra por los ojos, si no también por los oídos. Propio de los juego de terror, la banda sonora es mínima, ganando más protagonismo los sonidos que pueblan el ambiente y que permiten que te introduzcas dentro de ese mundo oscuro.

Hay escenas que son oscuras y que tendrías que usar la linterna. Suerte que puedes activar la mano que te dice cuándo puedes interactuar con algo

A mayores de esas referencias de pasos o de puertas que se abren, el ruido que más escucharás a lo largo de la partida será el que produzcan los enemigos. Cada uno tendrá uno característico que permitirá que logres reconocerlos hasta en la más absoluta oscuridad, presentado una variación para cuando siguen al personaje. De este modo, podrás reaccionar en muchas ocasiones por instinto a una situación en la que podrías morir. Pero esto también tiene su problema. Como dije antes, el hecho de que un enemigo de un piso superior pueda comenzar a seguirte (sin haberte visto siquiera) activará ese sonido y acabarás huyendo de la nada. 

Eso sí, el sonido ambiente saldrá de los altavoces de la televisión, mientras que los ruidos de los enemigos lo harán por el del mando de la consola. Aunque puede parecer una decisión acertada por acercarte esos ruidos, la mayoría del tiempo buscarás apagarlos y acabarás poniéndote unos casos donde evitas que haya «molestias».

El tratamiento del miedo varia mucho entre las distintas producciones (en los diferentes artes). Hay quienes disfrutan de ese momento puntual en el que te asustan, mientras que otros viven más del agobio generado y de la posibilidad de peligro inherente dentro de un ambiente hostil que puede acabar contigo en cualquier momento. Event Expansión inicia bien creando dos escenarios con sendos retos que el jugador tiene que superar con su habilidad, pero que, al pillarle el truco, se convierte más en una prueba y error desprovista de ese halo. La tensión la sigues teniendo, eso sí, pues no quieres empezar desde el principio. 

Injection Pi23 Event Expansion llegará acompañado del juego base el próximo 23 de abril de 2022 y servirá de preámbulo para «Ars Regia», la segunda parte que saldrá para Xbox Series, Xbox One, PS4 y PS5 el 23 de mayo de 2022.