Hoy os presentamos el análisis de Iron Harvest Complete Edition para PlayStation 5, ambicioso proyecto que fue anunciado en 2016 y cuya campaña Kickstarter llego a recaudar más de 1,5 millones de dólares, demostrando el interés captado por el público en su presentación. Tras unos leves retrasos, el juego se pudo lanzar finalmente en septiembre de 2020 para PS4, Xbox One y Steam, teniendo varias actualizaciones y DLCs desde entonces. Su desarrolladora, King Art Games, para conmemorar su aniversario, se enorgullece de presentarnos su versión más definitiva hasta el momento, con todos los contenidos adicionales que se han ido sumando desde su lanzamiento más unos nuevos totalmente gratuitos, inaugurando su entrada en la nueva generación con su versión para PS5 y Xbox Series X/S.
Acompañadnos en este análisis, ¡esta vez es la guerra!
Iron Harvest: Un mundo alternativo
Iron Harvest nos presenta una realidad alternativa en los albores del siglo XX y poco después de “la Gran Guerra” (referencia la 1ª Guerra Mundial (1914 – 1918)). En esta realidad, las tradiciones chocan con los avances tecnológicos y el progreso en una Europa aún recuperándose de los estragos de la guerra. No obstante, se avecina un nuevo enfrentamiento entre tres potencias, Polania, Saxony y Rusviet. Una joven habitante de Polania, Anna Kos, en compañía de su oso-mascota, descubrirá un sorprendente secreto a la par que vivirá de primera mano los estragos de la guerra.
Así se inicia esta aventura a manos de Anna, no obstante, ella no es más que una de las protagonistas del juego, en este caso, de la campaña de Polania. Habrá otros personajes en las campañas de Rusviet y Saxony, cuyas historias se entrelazarán con la de Anna y nos ayudarán a ver los diferentes puntos de vista de las diferentes facciones, enemigas entre sí. En este mundo alternativo, vemos un toque “Steam“, ya que las diferentes facciones han conseguido desarrollar una serie de toscos robots mecánicos con intención de inclinar la balanza a su favor en la cruenta guerra que está por venir.
La guerra es fea, no hay nada glamurosa en ella
Iron Harvest nos presenta una aventura de estrategia en tiempo real (RTS), género que predomina en PC debido a que suele jugarse haciendo uso de ratón. Sin embargo, el juego ha sido adaptado de modo que se hace bastante cómodo el uso del pad. Además de esto, la campaña, sin duda a alguna es la parte más interesante del juego, nos presenta una historia interesante, con personajes muy elaborados y con una dificultad muy accesible, sobre todo si no somos unos perfectos estrategas. Cada misión de la campaña cuenta con un objetivo principal y con uno o varios objetivos adicionales, que pueden dificultar la finalización del capítulo. Como hemos dicho antes, hay tres campañas en las que conoceremos los entresijos de cada una de las potencias, así como sus fortalezas y debilidades.
Como en todo juego de estrategia, para ganar hay que tener en cuenta diversos factores, siendo el principal el saber usar el entorno a nuestro favor: buscar cobertura para tener superioridad frente al rival será clave para la victoria, atacar con determinados escuadrones diferentes tipos de enemigos también será importante, así como la superioridad numérica, táctica que siempre funciona a las mil maravillas en cualquier título de estrategia que se precie.
Iron Harvest no es un título hecho para avanzar sin cabeza. Hay que ir con cautela, explorar el entorno y no ser detectados los primeros, pueden darnos una gran ventaja táctica. Algunos elementos del juego, como arbustos, servirán para algo más que para un fin decorativo, ya que podremos usarlos para ocultarnos y sorprender a alguna patrulla enemiga que pase cerca nuestro (como hemos dicho antes, a veces ser los que inician el ataque puede dar cierta ventaja).
Nuestro pelotón contará con un héroe que tendrá ciertas habilidades propias. Por ejemplo, Anna tendrá un disparo certero con su fusil francotirador y el apoyo de su inseparable oso. El héroe también contará con varios escuadrones, también con diferentes habilidades como los ingenieros, quienes podrán plantar minas, crear barricadas de alambre de espino o reparar estructuras para obtener recursos adicionales (necesarios para la creación de apoyo) o los artilleros, que utilizarán fusiles, pero tendrán la posibilidad de intercambiarlos con las que suelten los enemigos caídos (por ejemplo, por granadas). De este modo, dependiendo del arma que tengan, tendrán acceso a diferentes habilidades que podrán (o no) dar cierta ventaja contra determinados enemigos. También antes mencionamos los robots gigantes que usan los ejércitos, cabe decir que tienen mucha defensa y poder ofensivo por lo que, por ejemplo, una ventaja táctica es atacar a distancia y utilizar armas pesadas o de penetración, como el rifle de Anna.
Para el uso de habilidades primero habrá que seleccionar qué unidad querremos que la use, esto será tan sencillo como pulsar L1 o R1 para alternarlas o utilizar los botones de acceso rápido con la cruceta digital si queremos ser aún más precisos. Pulsando L2 desplegaremos un menú con diferentes órdenes que dar al escuadrón/héroe, como moverse a tal punto atacando lo que se cruce en su camino, uso de ataques cuerpo a cuerpo (una buena forma de evitar que las unidades enemigas usen armas de fuego) o el uso de las habilidades especiales antes mencionadas y que tienen un tiempo de enfriamiento mayor que un ataque normal.
Con el stick izquierdo desplazaremos la pantalla por el mapa, cosa que también podremos hacer con el panel táctil del Dualsense, y con el derecho moveremos el cursor con el que señalaremos las tropas o a que punto del mapa queremos ir. Cada unidad seleccionada tendrá un cómodo acceso rápido a las habilidades más comunes y a las que podremos acceder pulsando cuadrado, triángulo, círculo y equis, haciéndolo todo más accesible para el pad. A partir de todas estas facilidades, solo quedan nuestras habilidades de comando y estrategia para sobrevivir. Mencionar que por el mapa podremos encontrarnos con cajas con recursos médicos y armamentísticos que nos ayudarán en la aventura, ¡tener la salud de las tropas alta es clave para sobrevivir!
Además de la campaña, Iron Harvest tendrá un par de modos extras en los que jugar; como las escaramuzas o los desafíos, alargando la vida del juego considerablemente. Además, se han incluido los DLCs previamente lanzados, como son las campañas antes mencionadas (de 7 capítulos cada una) y las campañas adicionales «Operation Eagle» (7 misiones) y «Rusviet Revolution Campaign» (4 misiones). Acabar el juego nos llevará unas 25 horas, pero si queremos exprimirlo al máximo se nos puede ir fácilmente a las 45-50 horas.
Y como no todo es jugar, el juego nos presenta un glosario muy interesante, en el cual podremos empaparnos de todo del lore de este mundo alternativo de 1920, con fichas de personajes con datos de los mismos, de las unidades, de las armas, etc. En este apartado artístico, se nota que King Art Games ha sido muy cuidadosa y ha tratado todo son sumo mimo.
Un lore detallista y muy bien cuidado |
El mundo de Iron Harvest
Sin duda alguna, el mayor atractivo del título es la narrativa, y para que sea más creíble no hay nada mejor que un entorno gráfico en condiciones. No obstante, hay que tener en cuenta que un juego de estrategia en tiempo real tiene que tener un entorno gráfico no muy sobrecargado, ya que podría llegar a despistarnos de elementos realmente importantes. Iron Harvest cumple esta premisa con escrupulosa rigidez, ya que tendremos escenarios bien constituidos, pero sin llegar a estar sobrecargados del todo. Cierto es que algunas veces, al hacer zoom, los personajes pueden llegar a estar tapados por alguna rama de un árbol o similar, pero no es lo habitual.
Los gráficos serán correctos, cumpliendo con su cometido, pero sin llegar a destacar. Sin duda alguna si en algo flaquea el título es con las secuencias de vídeo CGI, las cuales, se muestran muy pixeladas y difuminadas para un juego de la actual generación, casi parecen como rescatadas y adaptadas de un juego de la generación anterior.
La calidad de las secuencias, sin duda, su talón de Aquiles |
El apartado sonoro será bueno: disparos, explosiones y efectos bélicos decorarán las misiones, con melodías puntuales durante el gameplay y con alguna pieza que puede llegar a sorprendernos dada su epicidad.
Como curiosidad, desde opciones podremos configurar el audio del juego, de forma que podemos poner subtítulos en español y audio en inglés, o que los personajes hablen en sus idiomas natales originales, un detalle que dota a la historia de cierto realismo. Una pega de los textos, especialmente en el caso de los tutoriales, es que su tamaño es muy reducido, obligándonos a acercarnos a la TV en alguna que otra ocasión (al menos en mi caso).
Conclusión
Iron Harvest nos presenta un gran título para los amantes de la estrategia en tiempo real, y encima, con todos los DLCs hasta el momento. Nos esperan horas y horas de entretenimiento asegurado, más aún si somos expertos coleccionistas o “completacionistas”. El juego cuenta con un par de modos extras, además de multijugador online, que alargan la experiencia más allá de su campaña. Iron Harvest tiene un carisma especial, especialmente por su apartado artístico, personalidad de personajes y desarrollo de sus campañas.
Iron Harvest Definitve Edition ya está disponible para Playstation 5 y Xbox Series S/X, si os ha gustado el análisis y estáis pensando en adquirirlo, os animamos a hacerlo a través del siguiente enlace.
Lo mejor
- El doblaje, muy buen inglés y opción de poner el audio original de cada personaje
- El desarrollo de la campaña, los personajes y su argumento
- Dificultad muy accesible
Lo peor
- Aunque el uso del pad es cómodo, sigues sintiendo que te falta un ratón para este tipo de juegos
- El tutorial es muy leve, teniendo que aprender muchas mecánicas con ensayo y error
- Tamaño de los textos muy pequeño
- La calidad de las CGI