Hoy os traemos el análisis de Vanquish Remaster para Xbox One S incluido en el bundle de Bayonetta y el frenético juego del que os hablamos con motivo de su décimo aniversario. Ambos juegos están listos para jugar en las versiones más potentes de Xbox One (X) y PlayStation 4 (Pro). No obstante, esta edición es tremendamente disfrutable en las versiones más asequibles de ambas consolas.

Ambos están disponibles desde el 18 de febrero, día de salida y con ellos se avecinan curvas y una acción trepidante que vamos a vivir con Vanquish, cuyo análisis podéis leer a continuación. Además, si no queréis dejaros nada en el tintero, también tenemos su guía para que no os falte de nada:


¿Otro remaster más? 

Vanquish ha sido dirigido por Shinji Mikami, a quien conoceréis por otros juegos de géneros completamente opuestos como The Evil Within Perteneciente al género hack and slash y uno de los juegos más frenéticos que os podéis encontrar, Vanquish nos ofrece un juego con acción a raudales y disparos en tercera persona.

Historia

El juego inicia la narrativa con el disparo de una enorme arma de tecnología microondas sobre los Estados Unidos. Los nacionalistas rusos han derrocado al gobierno de su país y tratan de hacerse con la hegemonía mundial. En este punto, la presidenta de los Estados Unidos encomienda una misión de importancia capital a un veterano de guerra condecorado (teniente coronel Robert Burns) y a la compañía Bravo.


Sam Gideon, el protagonista de la historia, es un investigador de la agencia de investigación DARPA que, con el fin de probar una nueva arma que pueda volver la guerra a su favor (una armadura de reacción aumentada) acompañará a la compañía Bravo y al teniente coronel Burns en su misión.

Durante todo el juego no iremos solos, sino que trabajaremos de la mano de esta compañía. Y, pese a que la historia parezca simple, se produce un cambio de guión y una reflexión final muy curiosa, que le otorga un matiz de profundidad inesperado.

Jugabilidad

Nos encontramos ante un título de disparos en 3ª persona y, en este aspecto, los mapas en los que se desarrolla la partida son totalmente lineales. Esto, que a priori podría parecer negativo, no resulta ser problemático debido a que no tendría sentido respecto a la trama que pudiéramos alejarnos o crear estrategias diferentes de la compañía y de Burns.

Curiosamente existe un botón con una función puramente estética: el botón del cigarro. Cada vez que nos cubramos y esperemos a que la ráfaga de disparos cese, a Gideon le dará tiempo a echarse una caladita. No tiene más funcionalidad que el mero hecho de fumar..

Combate

Lo magnético de este juego es el arma de DARPA (la armadura que lleva Sam Gideon) que nos permitirá movernos como auténticos surferos en el campo de batalla debido a los propulsores que tiene en brazos y piernas. En añadidura, este traje aumenta los reflejos del protagonista y, tanto si le han herido de gravedad como si el jugador lo cree conveniente, es capaz de entrar en un modo de »reacción rápida» que se traduce en que el tiempo fluye más despacio. Este hecho ayuda enormemente en cuanto a la puntería y la eliminación rápida de objetivos.


Nos encontramos también con un montón de armas de fuego diferentes, a medida que las vayamos cogiendo, y si tenemos el cargador lleno, iremos mejorándolas automáticamente (mejora de capacidad de munición, daño…).

De esta forma, pese a que el combate no es muy profundo, se hace tremendamente divertido, adictivo y fácil de manejar.

El punto fuerte de la doble edición: ¿Mejora gráfica?

Para este análisis, hemos exprimido la versión de Vanquish en Xbox One S y se ve espectacular, ya no solamente por la mejoría en fps (pasa de 30 a 60) respecto a las versiones de las consolas predecesoras, sino también en la mejora visual de los juegos en sí.


En el caso de Vanquish, como predominan los ambientes metálicos, la mejora en texturas, brillos y luces es bastante más notoria que en la mejora de Bayonetta.

Banda sonora

Durante todo el juego suena el mismo estilo de música, hecho que conlleva cierta dificultad en poder diferenciar las piezas como elementos únicos. No obstante, se nota que la banda sonora es un producto de calidad y no un saco de canciones insulsas. Considero que, debido a que el juego es acción non-stop, la música produce el mismo efecto. No hay momento de relax. Por lo tanto, me resulta difícil destacar piezas emblemáticas, aunque me quedo con Desperate Situation y con Final Battle.

Conclusión

La duración de la campaña es corta, ronda entre las 4 y 5 horas de juego repartidos en 5 actos. Esto podría tirar atrás a jugadores que sopesen la relación de dinero invertido y horas obtenidas. Pero me decanto en que el juego es adecuado de esta forma y que mantener el ritmo de acción durante unas horas más no le haría ningún favor (lo bueno si breve dos veces bueno).

Por último, resulta extremadamente curiosa la evolución que tiene el juego, empezando como un mata-mata, para acabar con una reflexión final.

Como enamorada de Vanquish, cualquier excusa es perfecta para volver a jugar con él. Más todavía si alguien no lo ha hecho, le pica la curiosidad y los desea jugar en consolas. No obstante, si uno posee un PC relativamente potente, la diferencia económica decanta la balanza a favor de esta plataforma.

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Lo mejor

– Mejora gráfica para las resoluciones actuales.
– Buena tasa de fps (60).
– Una steelbook con relieve para lucir en la estantería.
– Es un juego impecable. Tanto en estética, jugabilidad y narrativa.

Lo peor

– No aporta ningún añadido extra respecto a la versión de PC.
– Escasa rejugabilidad en Vanquish.
– No corre a 4k a día de salida (deberá ser implementada en parches futuros).
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