Se sabe que los elefantes son animales sagrados, extintos y mágicos, y que sobre la tierra no se ha visto uno desde hace más de un milenio. También se sabe que aparecen cuando en momentos de necesidad y que son símbolo de buena suerte y esperanza.
La última reencarnación de dicho elefante es Yono, un elefante que, literalmente, ha caído del cielo, y solo quiere ayudar a la gente ya sea con consejos o acciones.
Bajo esta sinopsis nos encontramos con uno de los juegos indies más queridos y esperados de este último año, ya sea por la ternura que inspira el personaje, como de su divertida jugabilidad. Así pues, vamos a analizar Yono and the celestial Elephants.
Yono: Como caído del cielo
Tras una breve introducción de apenas segundos, que nos sirve para ver un poco el origen del personaje, así como su objetivo en la Tierra, nos encontraremos con una niña pelirroja que nos irá orientando por el mapa y a la vez nos servirá de tutorial.
Yono and the celestial Elephants se nos presenta como, literalmente, muy mono todo, con colores brillantes y melodías alegres y una animación del personaje que hará que soltemos un «¡Oooh…!» al verlo.
Podremos ver como el juego está en perspectiva isométrica, y que es cámara fija, sin embargo, si usamos el otro stick podremos desplazar muy poquito la misma para poder ver un poco, y de manera insuficiente, el entorno, algo así como vimos en Metal Gear Solid 3: Subsistence.
Con este tutorial iremos aprendiendo diferentes mecánicas de Yono como embestir arrollando con su cuerpo, fijar el objetivo, muy útil para ver si hay objetos con los que interactuar en el escenario, usar la trompa, de modo que soplaremos con fuerza alejando de nosotros enemigos u objetos, así como activar diversos objetos tales como molinillos o ruedas.
En poco tiempo llegaremos al primer pueblo donde podremos ayudar haciendo misiones secundarias a diversos NPCs, quienes nos recompensarán con objetos o dinero al acabarlas. Aunque también podremos ir directamente al meollo del asunto.
La historia principal nos llevará a la ciudad principal, donde una reina nos pedirá auxilio ya que tiene un problema, y no hablaré más para no hacer spoilers.
Puzzles y más puzzles
El juego en sí, para los que somos un poco curtidos en el género de mazmorras y puzles, no presentará gran dificultad, realmente la sensación que da es de un juego para los más pequeños de la casa, ya sea por su estética como por la sencillez de los puzzles.
He de admitir que algunos son muy ingeniosos, aunque no complicados de solucionar, y que las mazmorras no han sido construidas de forma laberíntica de modo que te desorienten en exceso. Puzzles como embestir una pared para que caiga un objeto, rellenar la trompa de agua en algún cubo para apagar un fuego o hacer girar una rueda de agua son cosas que hemos visto cientos de veces, sin embargo, insisto, este juego es tanto para los iniciados en el género como para los curtidos, debido a que, pese a ser algo ya vivido, entretiene bastante.
Mecánica sencilla
Para no complicar el juego se puede apreciar cómo no han introducido muchas mecánicas complicadas, es decir, que el personaje evoluciona muy poquito desde que inicia el juego, lo que ayudará a los más pequeños, aparte de echar agua, más adelante podremos soltar fuego o disparar objetos como monedas por la nariz.
De hecho, a los más veteranos Yono and the celestial Elephants les resultará atractivo por su sencillez y relajado de su desarrollo, sin causar demasiado estrés, aunque por contra, no supondrá un gran desafío. Lo malo de todo esto es que al ser difícil trabarse afecta de manera directa a la jugabilidad, la cual suele rondar las 5-6 horas, dependiendo de lo que os guste perderos y explorar.
Coleccionables y exploración
Yono and the celestial Elephants presenta pocos coleccionables, podremos comprar con el dinero del juego diversas skins para nuestro paquidermo…¡Y ya!
Aparte si exploramos podremos encontrar diversos cofres en cuyo interior hay un cuarto de contenedor de energía, que, como en el Zelda, al reunir cuatro conseguiremos aumentar nuestro máximo de vitalidad.
Como curiosidad añadir que para que se canjeen esos pedazos por un contenedor habrá que visitar una tienda que hay en los pueblos donde nos lo canjearán completamente gratis. Además, para facilitar la exploración en los pueblos podremos ver como hay diversos teletransportadores para atajar entre zonas, para activarlos será necesario visitarlos previamente.
La sencillez como mejor baza
El juego es tan sencillo y cómodo que atrae, atrae de tal manera que te atrapa y te anima a seguir jugando. Como hemos dicho antes peca de corta duración, sin embargo, eso hace que no te agobies y no llega a quemar el producto, al contrario que otros títulos que son tan largos que llegan a aburrir al usuario.
Conclusión
Hemos analizado Yono and the celestial Elephants en Nintendo Switch y aunque de primera impresión parece un juego solo para los más peques, nada mas lejos de ello, se trata un juego que, pese a su corta duración, hará disfrutar de un divertido gameplay tanto a jóvenes como a mayores; por todo ello recomiendo jugarlo si tenéis un rato libre y queréis jugar sin llevaros a la boca un juego demasiado complicado.Si te gusta el juego y estás pensando en comprarlo, te dejamos un enlace a Amazon donde poder hacerlo.
Lo mejor
- Los gráficos, sencillos pero muy acordes, el juego no necesita más
- Lo cómodo de su jugabilidad y lo agradable de jugar que es
- Música en sintonía con el juego.
Lo peor
- Corta duración
- Puede parecer muy infantil para la mayoría, aunque no tiene por qué ser una pega necesariamente
- No aporta grandes novedades al género
